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jueves, 4 de marzo de 2021

LAS 101 JOYAS DESCONOCIDAS DEL CINE DE TERROR SEGÚN FANGORIA



No hay nada que me produzca más satisfacción que descubrir listas de películas de terror desconocidas o infravalorados. Para mi son como pequeños tesoros que estoy deseando abrir y descubrir. Como muchos ya sabréis, Fangoria es una de las revistas más longevas y prestigiosas sobre cine de Terror. Desde su fundación en 1979, nos han proporcionado infinidad de artículos, entrevistas, noticias y especiales sobre películas, videojuegos, libros o cualquier aspecto del entretenimiento más terrorífico. 

En 2011 se publicó una guía en la que varios de sus expertos eligieron las 101 mejores películas de Terror desconocidas para el aficionado medio del cine de género. Digo esto porque los auténticos Horror Lovers conocemos la gran mayoría y hemos visto muchas de las películas que nos proponen. Entre ellas podemos encontrar cintas que fueron desechadas por los distribuidores, fracasos iniciales, películas extranjeras (que ya sabemos que eso para los norteamericanos ya es una rara avis en sí misma) o producciones directas a vídeo que esperaban pacientemente ser descubiertas. También encontraremos las películas de directores de renombre que dada su fama, quedaron eclipsadas.

Os he contado todo este rollo porque me ha parecido una gran idea que juntos vayamos descubriendo las películas que Fangoria nos propone y valoremos sí son verdaderas joyas del Cine de Terror. Será un especial que vaya haciendo poco a poco dada su gran envergadura y siempre en artículos de 5 películas, para que no se nos haga muy pesado. 

Dicho esto, empezamos con las primeras 5 películas que nos proponen que casualmente ya había visto, pero he querido revisionar las que tenía más olvidadas para poder hablar de ellas como se merecen.



ALICE SWEET ALICE (1976)


Esta película es toda una joya del cine de Terror sententero y es considerada por muchos críticos como la película más Giallo de producción norteamericana, aunque su director confesara en ese momento, que no había visto nada de Dario Argento.

La película, ambientada en la católica y conservadora Paterson, Nueva Jersey, durante los años 60, nos presenta a Karen, una niña de 9 años que va a celebrar su primera comunión y recibe todo tipo de atenciones y regalos por parte de su madre y el joven párroco de la comunidad. Éste trato privilegiado molesta bastante a su celosa hermana Alice que se divierte fastidiando no sólo a su hermana, si no a quién se le pone a tiro. Por eso, cuando Karen es asesinada, todas las sospechas recaen sobre su celosa hermana. El padre biológico de las niñas que había rehecho su vida con otra mujer, regresa para apoyar a su ex en estos duros momentos y localizar al asesino porque está convencido de que Alice no es la responsable.

El libreto de Alice Sweet Alice corre a cargo de Alfred Sole y de su amiga y vecina en Paterson, Rosemary Ritvo, aunque a los mandos de la dirección sólo estaba Sole. El germen de esta película obedece a dos factores: uno, la influencia que ejerció en el director la película Don't look now (1973), de la que claramente tomo la idea del impermeable amarillo del asesino y la excomulgación de Sole de la diócesis de Paterson, a raíz de los cargos por obscenidad que recibió su anterior película Deep Sleep (1972), de claro contenido erótico. De ahí es de dónde viene todo ese ambiente anticatólico que respira la película y la decisión de no señalar a influencias demoniacas como responsable de los crimenes mundanos, si no al fanatismo y represión católica que tantos disgustos y matanzas han provocado

Una película que funciona como un giallo, en el sentido de que tenemos al padre de las niñas investigando por cuenta propia el asesinato de su hija, desoyendo las acusaciones y diagnósticos de policía y médicos que apuntan a Alice como única culpable. Por otro lado, tenemos a un asesino enmascarado con un careta bastante espeluznante: una especie de recreación de una muñeca, traslucida que da bastante grima.

Brooke Shields hizo su debut cinematográfico en esta película y dada la fama que alcanzó posteriormente con The Blue Lagoon (1980), cuando la película fue reeditada en 1981, se cambió el poster para utilizar su imagen como reclamo, a pesar de que en Alice Sweet Alice, sale apenas 20 minutos. La verdad es que su personaje es de los pocos adorables que tiene la cinta, porque de raros y odiosos anda sobrada. En primer lugar, Alice, a la que da vida una excelente Paula Sheppard que contaba por aquel entonces con 19 años, interpretando a una joven de 12, acaba de perder a su hermana víctima de una asesinato bastante macabro y ella no siente absolutamente nada. Como buena psicópata que es o acabará siendo en un futuro, en vez de llorar las penas, se dedica a hacerle la puñeta a su vecino, el desagradable Sr. Alphonso. Digo desagradable, por no llamarle otra cosa, ya que protagoniza una de las escenas más turbias de la cinta, cuando intenta propasarse con la perturbada, pero todavía niña, Alice.  También la tía de la criatura que ha llegado a la casa para ayudar a su hermana con el duelo, parece odiar a todo el mundo, especialmente a Alice de la que está segura es la asesina de su hermana. Así que salvando a los padres de las niñas que tienen unos momentos de resurgimiento romántico, muy a la italiana y el joven párroco que tiene un claro enamoramiento platónico de la madre, el resto de los personajes de la historias son bastante odiosos, por no decir detestables.

En definitiva, lo que más me atrae de Alice Sweet Alice es su imaginería religiosa tan inquietante, la sordidez del Sr. Alphonso, la frialdad de Alice, los asesinatos tan macabros y su retrato de un cristianismo radical asentado en la represión, las envidias y la hipocresía. 


ALONE IN THE DARK (1982)


Una de esas rareza del cine ochentero que quedó sepultada por el éxito de los slashers de asesinos enmascarados que masacraban adolescentes inmaduros compulsivamente. Aunque se la suele encasillar dentro de este subgénero, lo cierto es que yo la considero más una película de venganza que se acaba transformando en todo un survival. Es cierto que cuando los perturbados escapan de la institución psiquiátrica en la que estaban internos, dejan tras de sí un reguero de muertos y damnificados, pero tan sólo porque es el camino que les separa del objeto de su venganza.

Ópera prima de su director, Jack Sholder que también participó en la elaboración del guión y que años después nos traería otro título de culto para el fantástico, como es Hidden (1987). A grandes rasgos, la película trata sobre un grupo de internos de un psiquiátrico que se escapan de la institución, tras un corte de luz que tira por tierra todo el sistema de seguridad. Obsesionados con la idea de que el nuevo psiquiatra ha asesinado al anterior para ocupar su puesto, este grupo formado por cinco psicópatas bien definidos por las particularidades de su demencia, deciden acudir a la casa del nuevo doctor para vengarse por la supuesta muerte de su anterior psiquiatra.  

Los temas que se tocan en Alone in the Dark son bastante más profundos que los que suelen darse en un slasher prototípico. Aquí se desarrolla la idea de lo fina que es la capa que separa a los cuerdos, de los locos. La institución psiquiátrica en la que va a empezar a trabajar nuestro protagonista se distingue por la indulgencia en las técnicas, hasta con los pacientes más peligrosos que emplea su director. Un espléndido Donald Pleasence que en muchas ocasiones hasta nos hace dudar de que él mismo, sea uno de los los internos. Por otro lado, la familia de este nuevo psiquiatra, perfectamente normal y para nada violenta, tendrá que hacer todo lo posible para sobrevivir cuando estos locos asalten su casa, hasta el punto de  convertirse en asesinos, si fuera necesario. 

Si por algo destaca esta película es por un reparto excepcional. El grupo de pacientes que escapan de la institución está formador por: un ex soldado esquizofrénico y paranoico interpretado por Jack Palance, un párroco con tendencias pirómanas al que da vida Martin Landau, un abusador de menores y The Bleeder, un asesino que oculta su cara tras una máscara de hockey y que sangra por la nariz siempre que quiere cometer un crimen. Aunque estos dos últimos actores no son conocidos, para el papel de nuevo doctor del psiquiátrico, tenemos a Dwight Schulz, más conocido como Murdock del Equipo A (1983-1987), para todo aquel que se criase en los 80.

Como dato curioso, deciros que para la escena de la pesadilla final contaron con el artesano en efectos especiales, Tom Savini, con el que Sholder había trabajado en la grandiosa, The Burning (1981).

Alone in the Dark fue la primera película producida por la New Line Cinema, que ya había visto el filón del mercado de cine de género cuando se dedicaba exclusivamente a tareas de distribución. A esta productora, hoy en día absorbida por la Warner, le debemos sagas como A Nighmare on Elm street, Critters o The Texas Chainsaw Massacre

Considero que Alone in the Dark es una cinta que merece ser rescatada, no sólo por su reparto espectacular y sus guiños a películas como Halloween (1978) o Friday the 13th (1980), si no porque aborda temas o nos pone en situaciones mucho más complejas de las que se perciben a simple vista: el turbio pasado de la hermana del psiquiatra, la permisividad de instituciones mentales que pretenden que los internos sean más colegas que pacientes, las frágiles medidas de seguridad del centro y cómo en un país desarrollado como EEUU, un corte de luz a nivel municipal, puede acarrear disturbios violentos generalizados....


APT PUPIL (1998)


Apt Pupil o Verano de Corrupción, como se la conoce en España es una película que me perturba y me entristece terriblemente, no sólo por la historia que nos cuenta, si no por el trágico final de su protagonista, Brad Renfro que moriría a la temprana edad de 25 años.

La película está basada en uno de los cuatro relatos que forman parte de la antología de Stephen King, Las Cuatro Estaciones (1982) y que cuenta con otras dos historias adaptadas con éxito al cine como son: The Shawshank Redemption (1994) y Stand by me (1986). La realización de esta película fue un sueño cumplido de su director Brian Singer que desde que leyó el libro en su adolescencia, siempre había querido adaptarlo a la gran pantalla y tras el éxito que obtuvo con su ópera prima, The Usual Suspects (1995), puedo llevarlo a cabo. La trayectoria de Singer continuó es ascenso, en primer lugar con las películas de la saga de X-Men, pero sobre todo, por su trabajo más reciente hasta la fecha, la multipremiada, Bohemian Rhapsody (2018).

Apt Pupil nos muestra de una manera bastante gráfica, cómo el mal puede corromper a la mente más brillante e inocente. Un joven de 14 años, atraído por la ideología nazi, descubre que unos de sus vecinos es uno de los criminales más sanguinarios de la Segunda Guerra Mundial y ahora vive en su vecindario bajo una identidad falsa. El chico chantajea al anciano porque quiere que éste le cuente de primera mano las historias de la guerra que no le cuentan en el colegio, ni aparecen en los libros, a cambio de no denunciarle ante las autoridades. A partir de aquí, se inicia una relación de manipulación en ambos sentidos, bastante enfermiza que tendrá consecuencias terribles. Por un lado, el evocar viejos recuerdos e ideales que habían permanecido enterrados durante años, provocan que el monstruo que albergaba el interior de Arthur Denker/Kurt Dussander vuelva a despertase y al mismo tiempo, estas historias de torturas, vejaciones y asesinatos insensibilizan al chaval que poco a poco se va convirtiendo más que en un nazi, en un psicópata controlador y despiadado.

El guion que fue adaptado por Brandon Boyse, se aleja bastante de la novela en su tramo final. El relato de King concluye de una manera mucho más contundente, con una espiral de violencia a manos del propio chaval ya en su edad adulta que aquí sí que se ha convertido en todo un nazi, no sólo por sus impulsos homicidas, si no por los comentarios racistas que vierte sobre su novia judía. Por el contrario, aunque la adaptación de Boyce termina de una forma menos drástica en la que el chaval se ha vuelto un manipulador, pero parece que su maldad no va a ir a más allá, sigue poniendo los pelos de punta. 

Las actuaciones de ambos, especialmente la de Ian McKellen, son muy convincentes. Es todo un espectáculo ver la transformación que sufre el personaje de McKellen que pasa de ser un anciano decrépito de un apacible barrio residencial americano, a un ser despiadado, cruel y mucho más erguido que no se arrepiente de sus atrocidades del pasado. 

Aunque la historia que desarrolla la novela y la película son ficticias, esconden su parte de verdad. Durante la caída del Tercer Reich, mucho altos cargos nazis, especialmente científicos, fueron indultados y introducidos en la sociedad estadounidense mediante identidades falsas en la denominada Operación Paperclip. De hecho, tenéis disponible en Netflix, un true crime llamado The Devil next door (2019), sobre un entrañable ancianito estadounidense que fue identificado como Ivan El Terrible, un sanguinario operario de cámara de gas en los campos de exterminio de la Segunda Guerra Mundial. Si por el contrario preferís algo de ficción más gamberra, porque el True Crime es bastante duro, en Prime Video tenéis también la serie Hunters (2020), protagonizada por Al Pacino, sobre cazadores de nazis en suelo norteamericano durante la segunda mitad del s. XX.

En definitiva, Apt Pupil es una película que me fascina por sus similitudes con la realidad y al mismo tiempo me deja un poso de tristeza muy grande en el corazón. El mal nunca muere y puede terminar pudriendo a todo lo que está a su alrededor.



THE ASPHYX (1973)

The Asphyx es toda una rara avis del terror gótico británico que merece ser rescatada por su original visión del Mad Doctor, la inmortalidad y los experimentos para cambiar los designios divinos. 

Un rico científico de la época victoriana, aficionado a la fotografía, descubre una especie de bruma que aparece en las fotos cerca de la personas, cuando éstas están próximas a la muerte. Tras un trágico accidente descubre que este borrón no es alma de la persona abandonando el cuerpo, si no que es el Asphyx, un espíritu de la mitología griega que aparecía para llevarse a la persona al inframundo. Poseído por la idea de burlar a la muerte, nuestro científico fabrica un dispositivo capaz de atrapar a estos espíritus y así convertir a esas personas en inmortales. Sin embargo, el invento no parece funcionar del todo bien y cegado por la ambición y la arrogancia, este ingenuo mad doctor acabará provocando una serie de consecuencias devastadoras para toda su familia.

La película está ambientada en la impresionante mansión de la familia Cunningham dónde vive este prestigioso y respetado científico junto a sus hijos y su futura esposa. El interior de la casa nos trasporta a esa imagen que tenemos de la época victoriana con salas repletas de estanterías atestadas de libros, instrumental científico, retratos en blanco y negro y relojes de pie. Un ambiente científico intelectual que nos recuerda mucho al de la novela de  Frankenstein. Toda la acción se desarrolla en este entorno y le otorga a la película una apariencia bastante teatral.  

En la película no existe ningún villano, ni monstruo como tal, si no un espíritu, el Asphyx, al que ahora identificaríamos como la Muerte que viene a buscar a sus futuras víctimas porque les ha llegado su hora. No existe ninguna maldición, ni ningún oscuro designio, la muerte se limita a perpetuar el orden natural de las cosas. Lo que sí tenemos es un científico que cegado por el dolor y la tragedia realiza experimentos imprudentes que van más allá de su propia capacidad intelectual y cuya ambición lo acabará devorando. 

El diseño del Asphyx es bastante gracioso, una especie de holograma azulado que representa lo que a mi me parece una momia con la boca abierta y aspecto amenazador. La verdad es que me recordó bastante a los fantasmas verdosos de los Cazafantasmas, jejeje.

A pesar del gran trabajo de dirección y cinematografía que desprende The Asphyx está fue la única película que dirigió Peter Newbrook. El cineasta británico dedicó la mayor parte de su carrera a tareas de producción, cinematografía y operador de cámara en clásicos como The Bridge on the river Kwai (1957)Lawrence of Arabia (1962).

Más que una película de terror considero a The Asphyx como un drama de proporciones astronómicas con ciertas dosis de ciencia ficción. Una película interesante, sin villano, de ritmo pausado, con algún giro en la trama, sin demasiados sobresaltos que nos transporta a esa época en la que era plausible pensar en capturar el alma de alguien y convertirla en inmortal o juntar pedacitos de personas y crear un autómata. Una época donde los espíritus, las maldiciones formaban parte de la vida cotidiana y la inocencia ante lo desconocido era entrañable. 


THE BEYOND (1981)



Me es imposible no amar muy fuerte la trilogía extraoficial de las Puertas del Infierno de Fulci, especialmente su segunda parte. The Beyond o mejor con ese título tan maravillo que los italianos le ponían a sus gialli y películas de terror... E tu vivrai nel terrore! L'Aldilà es una cinta de terror que tiene una ligera coherencia argumental pero que sin embargo, su potencia a la hora de crear una atmósfera de pesadilla infernal, sigue funcionando a día de hoy como un tiro. La intensidad y el efectismo de la violencia y el gore en muchas de las escenas provocaron su censura en varios países y su ascensión a los altares del culto.

La historia gira en torno al hotel Seven Doors en Luisiana. La primera escena nos lleva a 1927, cuando una multitud mal encarada se dirige al hotel con antorchas y cadenas para dar muerte de una forma muy sanguinaria y atroz a Schweick, un artista al que acusan de brujería y haber traído una maldición al hotel y la ciudad. Su muerte abre una de las siete puertas del Infierno que estás esparcidas por el mundo y que permite a los muertos pasar al mundo de los vivos. Acto seguido, la acción nos traslada a la época actua en 1981, dónde Liza Merril, una neoyorquina que no tiene ni idea del pasado del hotel, lo ha heredado y lo ve cómo su última oportunidad para prosperar en la vida. Sin embargo, los trabajos de acondicionamiento del hotel activan el portal maldito y junto al médico del pueblo, su interes romántico, se enfrentarán no sólo a los muertos vivientes, si no a una infinidad de males que podrán contra las cuerdas a la desdichada pareja.

Habré visto The Beyond como tres veces y siempre tarda días en irse de mi memoria porque no paro de darle vueltas a su significado. Aunque la sinopsis de la película es a grandes rasgos la que os he señalado, hay muchas escenas que no aportan contenido a la historia, pero que están ahí por su impacto o para el despliegue de la artesanía gore de la que presume la película. Escenas como aquella en la que a la madre de una niña se le cae un liquido corrosivo encima. ¿Qué provoca que esa mujer esté petrificada en el suelo y que el líquido le caiga sobre la cara? Ni idea porque todo sucede fuera de cámara, pero da igual porque la escena es fantástica e impactante. Otra secuencia que también está insertada por la potencia de su escena gore es en la que la mujer ciega está rodeada por cadáveres que simplemente se quedan mirándola como figuras de cera y en un momento dado, ella le dice a su perro lazarillo que los ataque y se acaba liando muy parda porque el perro se zombifica, fuera de pantalla y la ataca a ella. No le encuento mucho sentido a esta escena en el conjunto de la historia, pero ¿no os parece enigmático que el perro la muerda la yugular y una oreja? Es decir, la víctima es una mujer ciega a la que acabas de dejar sin otros dos sentidos: el habla y el oido. 

La combinación de la belleza, el horror y la música en The Beyond me resulta totalmente hipnótica y nos traslada como en un mal sueño a ese mundo infernal. Tanto aquí como en City of the Living Dead dónde también aparece Catriona MacCall, pero en un papel diferente, abundan los primeros planos de los personajes totamente en sombras, tan sólo iluminados por una banda de luz sobre sus ojos. Los planos en sí son de una belleza expectacular, pero al mismo tiempo esta imagen transmite una sensación de inquietud y temor muy potente. Lo mismo pasa con una de las secuencias más icónicas de toda la cinta, aquella panorámica en la que la protagonista viaja por una carretera totalmente desierta y se detiene al ver a una mujer y su perro en medio de la calzada. Cuando se cierra el plano vemos que la mujer de gran belleza está ciega y su mirada nos pone los pelos de punta.

Sólo se me ocurren palabras de alabanza para esta película en la que encontamos de todo, desde demonios, hordas de zombis, arañas carnivoras o libro maldito hasta la revelación de lo que hay al otro lado de la puerta del infierno. No se ha escatimado en escenas sangrientas con una especial predilección por los rostros derretidos y los ojos que salen de las orbitas. Una joya sin duda del cine de terror, aunque para nada desconocida entre los aficionados al género.


jueves, 23 de enero de 2020

LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DEL 2019

Gif de @TrentShayClaymations en Instagram

Menudo año sabático bloguero me tomé el 2019, pero perdí la inspiración para escribir y la energía necesaria para mantener toda la maquinaria en funcionamiento. En una época en la que los blogs empiezan a estar de capa caída, debido al cambio en los hábitos de consumo de los aficionados al séptimo arte, que prefieren podcasts y canales de Youtube, el blog tenía que adaptarse a esos cambios y ofrecer propuestas atractivas para los Horror Lovers. Así que durante estos más de tres meses de ausencia, no sólo me he dedicado a descansar del gran trabajo que supone estar al mando de todos los aspectos que implican llevar un blog, si no que me he sumergido en una especie de super brain-storming para actualizar el contenido que os ofrezco. No penséis que fue una tarea sencilla porque todo proceso de creación implica su dificultad, pero por fin las ideas salieron a flote y estoy deseando traéroslas para que las disfrutéis. 

Antes de que eso pase, hay algunas tradiciones inapelables con las que hay que proseguir y como siempre os traigo mi TOP 10 con las que fueron PARA MI, las mejores películas de terror del año pasado. Aclaro que son las películas que yo he podido ver en cines, festivales o alguna plataforma a lo largo del 2019, así que no os echéis las manos a la cabeza si hay alguna película que vosotros consideráis de 2018. La vida es dura y no la he inventado yo.

¿Volvió a ser el 2019 el año de terror cómo lo llevan afirmando las publicaciones NO especializadas durante los últimos 5 años aproximadamente? Pues yo diría que NO. Cierto es que las producciones de género siguen incrementándose año tras año, para el goce y disfrute de los Horror lovers, pero a mi parecer, las películas del 2019 tuvieron una calidad media y no hubo tantos productos excepcionales como en años pasados en los que esta lista se hacia sola. 

Publico este TOP a mediados de enero porque aprovecho hasta el mismísimo día 31 de diciembre para ponerme al día con todo lo que se me pudiera haber escapado pero evidentemente, no puedo abarcarlo todo. Así que dicho esto, empezamos con las películas que destacaron sobre la media, en mis visionados del extinto ya 2019.



10. BLISS



La última posición de la lista es para Bliss, una película que ha ido ganando enteros a medida que la he ido digiriendo tras su visionado. Un visionado, que no la beneficiaba en gran manera, ya que sólo se proyectó en las maratones nocturnas de Sitges y después de las jornadas que nos pegábamos viendo una película tras otra, ponerte está explosión de color y sonido a las 2:00, era como si tú mismo te hubieses chutado lo mismo que la protagonista. 

La nueva propuesta de Joe Bergos es el viaje psicotrópico de una artista que frustrada tras haber perdido las inspiración para su último encargo, decide buscar en las drogas el fuego de Prometeo que tanto anhela. El descenso a los infiernos de nuestra protagonista es como si hubieran metido en una batidora a Climax (2018) y Mandy (2018). El resultado es una locura de cinta con música estridente, colores chillones, sexo, litros  de sangre y un ritmo vertiginoso que empieza la primera vez que nuestra protagonista recurre a sustancias prohibidas y ya no para nunca más. 

También la temática del artista que se vuelve medio loco y sus cuadros se vuelven cada vez más oscuros y enigmáticos como influencia de las fuerzas que les poseen, me recordó a Devil's Candy (2015). Una película bastante interesante del director Sean Byrne, el mismo de la gran The Loved Ones (2009) que también os recomiendo.

Ya os advierto que puede que durante la primera media hora de Bliss, no entendáis a dónde quiere llevarnos Bergos con esta historia, pero es un viaje salvaje que nunca olvidareis y que se guarda algún que otro secreto bajo la manga. De hecho, yo hubo un momento que solté un gran "Ahhhhh", cuando me di cuenta por dónde iban los tiros.

Una visión de los Ángeles sórdida y sucia que nos tramité la decadencia en la que está cayendo nuestra protagonista, Dezzy. Cabe destacar la impresionante actuación que se marca Dora Madison porque todo el peso de la película recae sobre ella y es parte fundamental de lo bien que funciona una cinta que con otra actriz al frente, habría sido una chapuza. 



9. IN FABRIC



¿Quién me iba a decir a mi que me iba a gustar tanto una película sobre un vestido mortífero? Una cinta que antes de verla en la pasada Muestra Syfy, no sabía nada sobre ella, pero estaba avalada por el guionista y director, Peter Strickland del que todavía no he visto nada más, pero del que siempre he oído buenas críticas.

Podríamos dividir la estructura de la película en dos partes bien diferenciadas con un hilo conductor que sería el vestido mortífero. La primera y mi preferida es la de una mujer divorciada que vive con su hijo y la odiosa novia de éste, que para su próxima cita decide comprarse un fabuloso (y maldito) vestido rojo. En el segundo tramo, nuestro protagonista celebra su despedida de soltero para la que le han elegido como disfraz nuestro famoso y maligno vestido. En ambas historias su posesión arrastrará una serie de desgracias y de momentos bastante inquietantes. La trama se irá enrareciendo hasta límites insospechados, no sólo por los desastres que acarrea la posesión del vestido, si no por las extrañas prácticas de los dependientes y dueños de la boutique durante sus horas de descanso.

In Fabric está enmarcada en una estética visual muy potente que nos recuerda fuertemente a los gialli: colores saturados con predominación del rojo, maniquís, ambientación setentera y hasta puede que las brujas de Suspiria (1977) hayan cambiado de oficio. La música es tremendamente inquietante y los diálogos pedantes y cargados de humor negro de algunos de los personajes, contribuyen a crear una atmósfera muy turbia y bizarra.

Una propuesta diferente que estoy segura no será del gusto de todo el mundo, pero que si os dejáis atrapar por una película con un vestido con vida propia, dependientas creepys, maniquíes profanados y jefes quisquillosos, In Fabric no os decepcionará. Si su recuerdo ha permanecido en mi memoria desde el mes de Marzo que la vi, será por algo, ¿no?


8. CRAWL



Ya sabéis lo que me gustan las películas de animales mortíferos y para mi está fue la triunfadora del duelo del pasado verano entre los cocodrilos y la propuesta de tiburones que fue la nefasta secuela: 47 Meters Down: Uncaged.

Tenía muchas ganas de ver el regreso de mi adorado Alexandre Aja al terror más puro, tras una temporada dedicado al drama fantástico con Horns (2013) y The 9th Life of Louis Drax ( 2016) y la verdad es que no me ha decepcionado.

A grandes rasgos, la película trata sobre una joven que va a rescatar a su padre que se ha quedado aislado en una cabaña durante un fuerte huracán, con la mala suerte que allí se han refugiado unos cocodrilos, del tipo mortífero extremo y la cosa se va a complicar mucho.

Aja nos da exactamente lo que queríamos para una película veraniega de cocodrilos mortíferos: acción desenfrenada, reptiles creíbles y agresivos, pero no con sentimientos humanos como la sed de venganza del tiburón de The Shallows (2016) y una protagonista fuerte y luchadora como Kaya Scodelario.

¿Qué hay elementos que la hacen no ser una película totalmente redonda? Estoy de acuerdo. Varias de las víctimas de los cocodrilos, están puestas con calzador con el simple objetivo de convertirse en carne de cañón para nuestros depredadores, pero una cinta de terror de estas características demanda un número aceptable de víctimas y muertes violentas y ésta es la manera de proporcionárnoslas. Así que esto no me produjo demasiados problemas.

Puede que Crawl no ascienda al podio de las películas de cocodrilos mortíferos (puesto ocupado por Rogue (2007) desde hace más de una década), a pesar de sus múltiples referencias cinéfilas a Jaws (1975) o Jurassic Park (1993) y a hechos reales, sí en los huracanas hay quién aprovecha para robar, pero sí es un producto adrenalítico y altamente disfrutable.


7. UPGRADE



Al igual que con In Fabric, pude disfrutar de Upgrade en la pasada edición de la Muestra Syfy y la disfruté a lo grande. Las dos veces que Logan Marshall-Green se ha pasado por este Festival ha sido con sendos peliculones (el anterior fue The Invitation (2015)). Creo que ya ha llegado la hora de que le quitemos esa etiqueta que le encasilla como la versión Hacendado de Tom Hardy porque es un gran profesional que nada tiene que envidiarle al actor de Venom (2018)

Segundo trabajo de Leigh Whannel como director, tras Insidious: Chapter 3 (2015). Ahora el cineasta australiano tiene a las puertas del estreno The Invisible Man (2020), una de las películas más esperadas del año que cuenta con Elisabeth Moss como protagonista y con ella en el barco, nada puede salir mal.

Upgrade nos habla de una pareja que sufre un accidente y cuando nuestro protagonista se despierta en el hospital, descubre que se ha quedado parapléjico. Uno de sus antiguos clientes le ofrece la oportunidad de implantarle un chip en su espina dorsal que le permitirá volver a caminar. Además de esta habilidad nuevamente recuperada, todo su organismo se verá actualizado con múltiples destrezas que le vendrán muy bien porque la trama se va a volver muy loca y este Johh Wick cibernético va a repartir mandanga de la buena. 

A pesar de que Upgrade tiene una trama sencilla, los debates que se plantea su protagonista no los son tanto y parecen sacados de un episodio de Black Mirror (2011-2019). La historia nos sitúa en un futuro cercano, dónde la nuevas tecnologías ya permiten hacer cosas increíbles, pero todavía existen personas que prefieren hacerlo todo a la viaja usanza y reniegan un poco de estos nuevos adelantos. Es el caso de nuestro protagonista, mecánico de profesión, que tendrá que sobreponerse a sus reticencias tecnológicas para salir adelante.

Esta cinta de serie B lo tiene todo: acción, terror y ciencia ficción. En cierta manera, me recordó a las grandes películas del fantástico de los 90, estilo Hardware (1990), Universal Soldier (1992) o Fortress (1992) con las que nos lo pasábamos en grande con la acción que veíamos en pantalla y tampoco necesitábamos una actuaciones impresionantes, ni unas tramas creíbles. Simplemente era entretenimiento y diversión. Upgrade renueva las escenas de lucha con movimientos mecánicos, secos y rapidísimos como si de una mezcla de John Wick y el T-1000 se tratase, pero mantiene ese tufillo de serie B con una trama oscura de las traiciones y de luchas de poder en los bajos fondos tan típicas de antaño.


6. THE LODGE



The Lodge era una de las películas que mas ganas tenía de ver en la pasada edición de Sitges, ya que venía avalada por los directores de la tremendamente inquietante Goodnight Mommy (2015): Veronika Franz y Severin Fiala. Los directores austriacos vuelven a indagar en los problemas de las relaciones entre padres e hijos, en este caso, con una futura madrastra.

Los padres de Aidan y Mia se están divorciando, ya que su padre se ha enamorado de Grace, la única superviviente del suicidio colectivo de una secta, cuando éste estaba escribiendo un artículo sobre ellos. Los niños no aceptan a Grace y a su padre se le ocurre la feliz idea de que los cuatro pasen las Navidades en una cabaña en medio de ninguna parte. Sin embargo, este "genio" en psicología familiar tiene que ausentarse unos días por trabajo y deja allí a los tres juntos para que hagan migas. Y, ¿qué os tengo yo dicho que pasa en el cine de terror con las cabañas aisladas, ya sean en el bosque o en la montaña? Que las cosas no salen como uno había imaginado, si no, infinitamente peor y esta película no va a ser una excepción. 

Como dato curioso, deciros que la secta a la que pertenecía Grace en el pasado está inspirada en los hechos acontecidos a la secta ovni, Heaven's Gate, en la que su líder arrastró a 39 de sus seguidores a un suicido colectivo tras el paso del cometa Hale-Boop en 1997.

Una de las mejores cosas que funcionan en The Lodge y que te hace estar sentado al borde de la butaca, preparado para saltar cuando se produzca la gran revelación, es su atmósfera tremendamente opresiva, oscura y helada. Los tres protagonistas están aislados en una cabaña, en plena tormenta de nieve, la calefacción ha dejado de funcionar y los teléfonos han muerto. Por si esto no fuese suficientemente dramático, la relación de Grace con los niños es bastante tirante y empiezan a suceder cosas raras en la casa. 

¿Fuerzas ocultas acechan la cabaña, alguien está volviéndose loco? La cosa es que cuando la tensión que llevamos conteniendo durante prácticamente toda la película, salta por los aires, te deja con el culo totalmente torcido. Hay gente a la que este giro de la trama no les gustó nada, pero a mi me funcionó perfectamente y me pareció absolutamente terrorífico. Creo que The Lodge es de esas cintas en las que si la trama y la atmósfera no te atrapan desde el principio, corres el peligro de que su final no te funcione e incluso te resulte una estafa. 

The Lodge es un thriller psicológico que se desarrollan a fuego lento, que te va sobrecogiendo poco a poco y en el que tanto la banda sonora, como los silencios que te ponen la piel de gallina, inciden en esa atmósfera sobrecogedora que nos atrapa desde el minuto uno. Si no teméis la historias que se desarrollan lentamente y disfrutasteis con películas como The Witch (2016) Hereditary (2018), creo que The Lodge puede ser de vuestro agrado.  



5. DANIEL ISN'T REAL



Ésta fue la última cinta que vi y que se coló por derechos propios en la lista de lo mejor del año. En cierta manera, me recordó a la anteriormente comentada Upgrade en el sentido que es perfectamente posible crear una gran película de terror/ciencia ficción con un presupuesto moderado, pero con un montón de buenas ideas. Los responsables de traernos esta gran película de serie B, no son otros que Spectre Vision, popularmente conocida como la productora de Elijah Wood. Cuanto tenemos que agradecerle los horror lovers a este actor con el comparto año de nacimiento, por su gran labor hacia el jorror, ya que nos ha traído algunas de las mejores cintas de género de los últimos años: The Greasy Strangler (2016), Mandy (2018) o Color Out of Space (2019).

Segundo largometraje de su director, Adam Egypt Mortimer del que tan sólo he visto la antología de Holidays (2016) en la que participaba en uno de los episodios y lo cierto es que no puedo hablar muy bien de ella. Sin embargo, después del buen sabor de boca que me ha dejado Daniel isn't real quizás pruebe suerte con su anterior trabajo, Some Kind of Hate (2015), a pesar de que sus críticas son más que modestas. La película, basada en la novela de Brian DeLeeuwIn this way I was saved, tuvo la suerte de contar con el propio escritor para la elaboración del guion junto a Egypt Mortimer y son más que evidentes las similitudes de la historia con The Fight Club (1999) y Donnie Darko (2001). Podríamos ver a Daniel, el oscuro amigo imaginario del protagonista, como una versión moderna de Tyler Durden y con la película de Richard Kelly comparte la enfermedad de sus protagonistas y las visión alterada que éstos tienen de la realidad. 

Daniel isn't real nos presenta el viaje a los infiernos de nuestro protagonista Luke, un joven con problemas de esquizofrenia que tiene una amigo imaginario que actúa como su alter ego, mostrando su lado más oscuro. Al principio, será una ventaja contar con este amigo que le ayudará a reafirmar la confianza en sí mismo y destacar en clase o lucirse con las chicas, pero a medida que pasa el tiempo, los deseos de Daniel se van volviendo más oscuros y tóxicos. 

Una película que se envuelve en una estética retro, muy de moda últimamente en cintas cómo Neon Demon (2016), Mandy (2018) o la anteriormente comentada, Bliss (2019), que se caracterizan por potentes bandas sonoras y saturación de colores en algunas de sus escenas. Esto contribuye a que un tema cómo los problemas mentales del protagonista, ya sobradamente tratados en el cine, adquiera aquí una dimensión muy atractiva, cercana a un terror de carácter surrealista. 



4. VIVARIUM





Le toca el turno a la cinta que más disfruté de todas las que puede ver en la edición VII del Festival Nocturna de Madrid. Un propuesta de ciencia ficción muy turbia en la que una joven pareja que está buscando la casa de sus sueños, termina atrapada en un barrio residencial de pesadilla.

La película que nos propone Lorcan Finegan, en su segundo trabajo como guionista y director, más bien parece sacada de un capitulo de Twilight Zone (1959-1964) o de Black Mirror (2011-2019). La película parte de una premisa sencilla que se va enturbiando y enrareciendo de mala manera y en la que la estética medio onírica, medio fantástica es sublime. 

En su esencia, Vivarium contiene una fuerte crítica contra el estilo de vida acomodado en los barrios residenciales de la clases medias, dónde todo es aparentemente perfecto. Aquí esa perfección raya en lo desesperante: las calles del barrio de nuestros protagonistas están formadas por hileras interminables de casas idénticas a la suya, el cielo es azul sin una sola nube, en su casa todo está decorado a la perfección, pero de un manera anodina e impersonal. La monotonía de su día a día irá minando la buena relación de esta joven pareja que no puede soportar el tedio y la desesperación de verse atrapados en una situación que no han elegido o quizás sí.

La película se enmarca en una estética cuidadísima llena de tonos pastel, dónde predomina el verde, las líneas rectas, la pulcritud y la copia. Las casas, los jardines, todo es igual y se repite una y otra vez, hasta los cuadros de la casa representan la propia casa o partes de la misma. Es como si los personajes se vieran atrapados por el estilo de vida perfecto que habían soñado. ¿Lo queréis? Pues aquí tenéis dos tazas.

La química entre sus dos protagonistas en innegable. Imogen Pots y Jesse Eisenberg ven como la maquinaria de la vida acomodada hace mella en su relación, reproduciendo de forma exagerada estereotipos de género: Él sale todos los días a trabajar (escavar un hoyo que no tiene ninguna función, ni sentido) y ella se dedica a la crianza de un niño que no es suyo y que tiene una clara tendencia a la sociopatía.  


Vivarium es una de las propuestas más refrescantes y mal rolleras de todo el año y no deberíais perdérosla, sobretodo si pensáis que la máxima de la felicidad es casarse, tener un hijo y vivir en la casa de tus sueños. Es todo un engaño de la mal llamada: Sociedad del Bienestar.  


3. READY OR NOT



No tenía muchas expectativas en que una película producida por la Disney/Fox y que iba a tener recorrido en las salas comerciales, pudiese ser tan gamberra, divertida y sorprendente, como lo es Ready or Not, pero se acabó convirtiendo en mi cinta favorita del pasado festival de Sitges. Lo que no sabía en ese momento y que descubrí tras investigar un poco más sobre la cinta es que detrás de ella está la Fox Searchlight, lo que viene a ser la filial más irreverente de la gran productora y que nos ha traído películas nada convencionales como: Juno (2007), Black Swan (2010) o Shape of Water (2017). Así que la próxima vez que me enfrente a una producción de la Fox me fijaré antes en que filial la respalda, antes de echarme a temblar, jejeje. 

Un survival en el que una novia debe de huir de la familia de su recién estrenado marido que intenta matarla, porque si sobrevive a esa noche fatídica, una curiosa maldición se cernirá sobre todos ellos. 

Uno de los grandes aciertos de Ready or Not es que va directa al grano y una vez celebrada la boda y elegido el juego para esa noche, pasamos a la acción desenfrenada y el ritmo vertiginoso de este escondite macabro. Aunque la absoluta protagonista es la nueva Final Girl del s. XXI, Samara Weaving que en esta película le quita el título a Leticia Dolera en lo que a novia mortífera molona se refiere, el resto de secundarios están sublimes en sus roles estereotipados de familia política odiosa. No podía haber mejor elección para este patriarca totalmente descerebrado y fiel a las tradiciones familiares, que Henry Czerny. No hay nadie como él para interpretar papeles de villano despiadado con clase y para prueba, la serie Revenge (2011-2015). Su mujer, interpretada por Andie MacDowell, es un personaje bastante ambiguo y nunca tendremos claro si es de fiar o no. Pero el personaje que me robó el corazón fue la despiadada matriarca, interpretada por Nicky Guadagni que a sanguinaria y perturbada no le gana nadie y en esa familia de desequilibrados, la competencia es dura.

Ready or Not es una comedia de terror que destila un humor negro como el carbón, en lo que supone una crítica contra las clases adineradas y las dificultades a las que se enfrenta una persona normal para entrar en un círculo tan cerrado y sus peculiares tradiciones familiares. Todo esto bastante salido de madre eso sí, pero contribuye muy bien a que el público se identifique con esta novia normal y de clase media, en la que su supervivencia puede verse como una lucha frente al orden establecido por los ricos y la tradición más casposa. 

La cinta es el último trabajo del tándem formado por Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillet , también llamados Radio Silence y que ya trabajaron juntos en uno de los segmentos de VHS (2012), de Southbound (2015) y en el largometraje Devil's Due (2014) que no he tenido el placer o la desgracias de ver, dado sus críticas más que modestas. 

Si todavía queda alguien que no ha visto Ready or Not, os la recomiendo muy mucho porque es una de las películas más refrescantes del año, con un final a la altura de las grandes expectativas creadas y con lo que creo que es un guiño a Takeshi Miike, ahí lo dejo. Además, es una cinta que puede ver prácticamente todo el mundo, al que le guste la tensión, la acción y no le importe un poquito de sangre.


2. US



Para un director que con su primer trabajo consiguió un éxito tan fulgurante como Jordan Peele con Get Out (2017), su segunda película no iba a ser tarea fácil, ya que iba a ser observada con lupa por críticos y espectadores, dispuestos a endiosarlo o con hacha en mano para sepultarlo. 

La verdad es que ha sido recabando información para hablaros de ella que me han entrado unos deseos irrefrenables de volverla a ver. Aunque ya conozco el gran enigma de la trama, considero que es una película que tiene varias capas de información que iremos descubriendo es posteriores visionados. Además, también tiene diferentes interpretaciones a la cuestión que nos plantea y que según el momento en el que nos enfrentemos a ella y la información de la que dispongamos en ese momento, pueden variar. Aquí os dejo el super vídeo que se marcó Emma de Spooky Astronaut explicando cada referencia, Easter egg (conejos, tijeras, guantes y 11:11) y posibles interpretaciones que encontramos en Us.

En cierta manera y salvando las distancias, esta película me recuerda a alguno de los capítulos más controvertidos de Black Mirror (2011-2019) que solía comentar con amigos y me resultaba muy curioso descubrir que según las experiencias y la cultura de cada uno sobre los temas que se trataban, las interpretaciones podían ser muy diferentes.

A estas alturas del año, ya todo el mundo sabe que Us es una película de terror sobre los doppelgängers, los dobles malvados que todos tenemos por ahí pululando y que el día que nos encontremos cara a cara con el nuestro, sera un augurio de nuestra propia muerte. Yo como cohabito con mi lado Bloody y mi lado Princess, ese problema no le tengo, jejeje. Pues bien, es esta película una familia afroamericana de clase media americana se ve a enfrentar exactamente a la versión mortífera de sí mismos. 

El terror en Us no es solamente opresivo por la invasión del hogar que sufren los protagonistas, si no que el hecho de estar siendo atacados por una copia de si mismos que en ningún momento saben cómo va a actuar, es completamente perturbador. Lo que más me gusta del cine de Peele, sí de sus dos películas, es que no se limita a plantearnos una sencilla historia de terror (que también son validísimas, no me estoy quejando), sino que lo utiliza como un vehículo muy efectivo para lanzar una contundente critica social. Si en Get Out nos ofrecía una crítica incisiva contra el racismo y la hipocresía de las clases altas, aquí lo que nos plantea es una visión amarga y desoladora contra el capitalismo y el miedo a ser suplantado. 

Las actuaciones de todos y cada uno de los personajes son sublimes porque se ponen en la piel de dos personajes antagónicos y lo bordan. Especial mención para su protagonista, la últimamente omnipresente Lupita Nyong'o, que quién me iba decir a mi a esas alturas de año con lo que me había gustado en esta película que iba a acabar detestándola por esa cinta que casi todos amáis y yo odio muy fuerte, la extremamente ñoña y edulcorada, Little Monters (2019). No puedo dejar de nombrar a mi adorada Elisabeth Moss que aunque no aparezca mucho en pantalla, tiene una escena hacia el final de la película que es absolutamente sublime y se me quedó grabada a fuego. 

Una de las cosas que me gustan de los directores jóvenes de ahora es que sienten la necesidad de compartir con el mundo las películas que les han inspirado o influenciado para crear su historia. En este caso, os dejo las 10 películas que Peele les dijo a su actores que debían verse para preparar sus personajes y salvo la primera, las he visto todas (increíble):
  • Dead Again (1991)
  • The Shinning (1980)
  • Babadook (2014)
  • It follows (2014)
  • A Tale of two sisters (2003)
  • The Birds (1963)
  • Funny Games (1997/2007)
  • Martyrs (2008)
  • Let me in (2010)
  • The sixth sense (1999)


1. MIDSOMMAR



Sin duda, la película con la que peor lo pasé y por consiguiente, la que más he disfrutado este año, ha sido Midsommar. Si os soy sincera, no contaba con que la nueva película de Ari Aster me fuese a conquistar, ya que soy de las pocas a la que Hereditary no le impresionó tanto como a la mayoría. 

No necesito sentirme identificada con el personaje de una película para que ésta me guste, pero en esta ocasión, entendía tan bien como se podía estar sintiendo la protagonista con respecto a uno de los dramas que la tocan de lleno, que salí del cine echa polvo. Esto es algo que sólo entenderán los horror lovers y no los que me preguntan que por qué voy al cine a pasarlo mal, pero que una película consiga removerme por dentro y transmitirme sensaciones de manera tan visceral, para mi tiene un valor incalculable. 

A estas alturas ya sabemos que Midsommar cuenta la historia de Dani, una joven que intenta superar una tremenda tragedia familiar y decide unirse al viaje que su novio y sus amigos, estudiantes de antropología, deciden hacer al festival del solsticio de verano que se celebra en un pequeña comuna de la campiña sueca. Allí las cosas no son lo que parecen y las tradiciones de esta comunidad son más oscuras y salvajes que lo que nuestros protagonistas imaginaban.

Midsommar se enmarca dentro de ese reducido grupo de película de terror diurno en las que todo el horror se produce a plena luz de día y ningún susto procede de alguien o algo que se oculta entre los sombras: The Birds (1963), The Wicker man (1973), Who can kill a child (1976), Funny Games (1997/2007) o Bone Tomahawk (2015). Además, la belleza de las imágenes de la campiña y de esta bucólica comunidad floral, se transforman en cuestión de segundos, en algo terrorífico e incluso gore. Si ya el año pasado  Hereditary nos ofreció un montón de imágenes icónicas para el imaginario del cine de terror, Midsommar no se queda atrás.

Aunque las dos películas de Ari Aster no tienen nada que ver a nivel argumental, ni de escenografía, ambas dejan vislumbrar las dotes y el estilo propio de un director que esperemos que de mucho que hablar en los próximo años. La gran potencia visual de las imágenes, unida a la maestría a la hora de utilizar el sonido, hacen de Midsommar una experiencia única para todos los sentidos.

Y, como dato curioso os vuelvo a dejar las películas que según el joven director hay que ver previamente para entender mejor Midsommar y aunque a estas alturas eso ya sea prácticamente imposible, nunca viene mal echarle un vistazo a las fuentes que utilizó como referencia para crear semejante joya:
  • Black Narcissus (1947)
  • MacBeth (1971)
  • Tess (1979)
  • ¿Qué difícil es ser un dios (2013)




Hasta aquí llega el TOP con mis 10 películas favoritas del pasado 2019 en lo que a Terror se refiere. No obstante, ha habido varias que se han quedado fuera por muy poco y me gustaría mencionarlas, para que las tengáis en cuenta por si no las habéis visto todavía:


MENCIONES DE HONOR


LEAP OF FAITH: WILLIAM FRIEDKLIN ON THE EXORCIST: No está en la lista principal porque es un documental, pero me parece ORO PURO. Entrevista a Friedklin dónde nos cuenta las anécdotas y el por qué de cada decisión artística de la que para mi es la mejor película de Terror de todos los tiempos.

HAUNT: Un slasher correcto, entretenido, con alguna muerte bastante sangrienta y los payasos mas chungos del 2019.

RABID: De cómo hacer cualquier cosa por preservar tu belleza, puede cobrarte una tremenda factura e incluso generar una epidemia sanguinaria.

BRIGHTBURN: La versión maligna y molona de Superman. La idea de qué hubiese pasado si el gran héroe no hubiese ido por el buen camino, me pareció muy entretenida, gamberra y mucho más gore de lo esperado.

4X4: Como ir a robar un coche y quedarte atrapado en él y que esto se convierta en un calvario asfixiante y agónico. Salvo su mensaje social metido con calzador, bastante entretenida.

THE PERFECTION: De cómo los sueños truncados y las aspiraciones por ser la número uno, pueden convertirte en un monstruo.


Y, como siempre, no podrían faltar las grandes decepciones y truños del año de las que hay que huir muy fuerte, que ya he hecho yo el sacrificio de verlas por vosotros:


TRUÑOS DEL AÑO 


HAPPY DEATH DAY 2U: No me gustó el giro de esta segunda parte hacia la ciencia ficción y el romanticismo. Eché mucho de menos la carga de terror. 

47 METERS DOWN: UNCAGED: No me funcionó nada bien esta película de tiburones que se adentran en el universo de The Descent, pero con resultados totalmente opuestos.

RATTLESNAKE: Primer batacazo de Netflix con esta historia de maldiciones y deudas con seres sobrenaturales carente de alma y de interés.

WOUNDS: Otra de las producciones de Netflix, pero en este caso una que ha causado gran controversia. Hay quienes la aman y otros como a mi, a los que le ha parecido un tostón incomprensible y del que hubiere necesitado media hora más de película para entender el sentido de la trama.

BODY AT BRIGHTON ROCK: Una premisa, a priori interesante, con una chica bastante torpe perdida en un bosque y con algo o alguien que la acecha, que se acaba convirtiendo en una cinta de terror psicológico extremadamente light y tramposa. 

LITTLE MONSTERS: Se que aquí estoy en minoría, pero hacia tiempo que no odiaba tan fuerte una película. Una comedia zombi con niños y una Lupita muy divertida sí, pero excesivamente edulcorada, mema y horrible. No puedo con ella, lo siento.




lunes, 3 de junio de 2019

LA LETRA CON SANGRE ENTRA - ESPECIAL PROFESORES MORTIFEROS


Menudas vacaciones blogueras me estoy pegando y es que este año han coincidido muchos viajes, celebraciones de cumpleaños y una intensa vida social que han limitado bastante mi tiempo para escribir. Sin embargo, mi participación en podcats se ha incrementado notablemente: Scanners, Aguas Turbias, El terror no tiene Podcast, El calabozo del Reverendo Wilson, En la Boca del Cinéfago, Nakatomi RadioButaca y butacón y, en breve, también en Almas OscurasAdemás, he estado trabajando en un proyecto que pronto verá la luz y que me hace mucha ilusión, así que ausente, lo que se dice ausente, tampoco he estado. Para compensaros un poco por este parón bloguero y porque me encantan los especiales de películas, os traigo las cinco películas con los profesores más mortíferos del cine de terror.

Aprovechando que los alumnos de colegios e institutos están a punto de finalizar sus clases, qué mejor que analizar el papel de los profesores en el cine de terror. Aunque a algunos ya nos pille lejos nuestra época estudiantil, ¿quién no pensó alguna vez que sus profesores parecían extraterrestres o que le tenían una manía cercana a la psicopatía? Pues bien, en el cine de género, esto no sólo sucede, sino que todo se vuelve mucho más sangriento, mortífero y cruel. Como hija de una profesora de infantil que ha vivido durante muchos años en ese ambiente, puedo asegurar que es una profesión con mucha presión, poco valorada, con una alta responsabilidad y muy muy exigente. Así que no es de extrañar que bajo esta presión, los protagonistas de estas cintas que no son precisamente los seres humanos más ejemplares del mundo, cometan actos criminales en venganza por un agravio contra su persona o simplemente debido a una abducción extraterrestre. Esperemos que al profesorado real no se le ocurran estas ideas, aunque si les seguimos poniendo contra las cuerdas, no sería muy raro que pronto, la realidad supere a la ficción. 



CONFESSIONS (2010)



Ya sabéis que siempre digo que en el cine, nadie se venga como los coreanos, pero esta película japonesa del mismo director que The World of Kanako (2014), Tetsuya Nakashima, no tiene nada que envidiarles. El último día de clase de un instituto, la profesora Yuko se despide de sus alumnos y les hace saber que su hija de cuatro años que aparentemente murió ahogada en la piscina de la escuela, fue en realidad asesinada por dos alumnos de esa misma clase. Y, como no podía ser de otra manera, les confiesa que la venganza contra los responsables ya se ha puesto en marcha.

Confession es una película que te atrapa desde el primer momento por su fuerza visual, su estética videoclipera y en definitiva, por su crítica mordaz contra el sistema educativo y la sociedad del s. XXI. También es una cinta de venganza y menudo plan que ha trazado nuestra profesora de aspecto pulcro y educado que termina convirtiéndose en un ángel vengativo cruel y despiadado. La cinta nos plantea cuestiones tan incomodas como que la sobreprotección a la que sometemos a niños y adolescentes pudiese estar provocándoles un sentimiento de irresponsabilidad ante semejantes actos criminales. La educación dentro de las familias, el bullying y el narcisismo son temas que se abordan en Confession y cómo todos estos factores puede llegar a destruir la vida de los protagonistas y sus allegados.

Sorprende la frialdad y la crueldad extrema en la venganza de Yuko, tras haber sufrido un golpe tan duro como es la muerte de su hija pero, sin duda, supondrá el goce y disfrute para los espectadores de esta apasionante thriller psicológico con claros tintes mortíferos. 

MORALEJA: Ten cuidado con qué profesor te metes porque puede ser mucho mas psicópata que tú.



DISTURBING BEHAVIOUR (1998)



Sin duda, la cinta menos memorable de toda la selección pero merecía estar en esta lista por la naturaleza de sus profesores mortíferos. En Comportamiento Perturbado, como se la conoce en nuestro país, tenemos a un joven James Mardsen, antes de convertirse en Cíclope, que se traslada junto a su familia al pueblo de Cradle Bay. Una vez allí, percibe que el comportamiento idílico y un tanto nazi de determinados alumnos es un tanto sospechoso ya que dividen su vida entre la ayuda al prójimo y los ataques violentos cuando se excitan demasiado. Con la ayuda de una adolescente Katie Holmes, descubrirá un macabro plan en el que los profesores no están libres de pecado. 

La secta que opera en el instituto se encarga de que los alumnos más problemáticos y rebeldes se conviertan en ciudadanos ejemplares, carentes de sentimientos. El problema llega cuando a éstos se les somete a fuertes emociones como el sexo o un rechazo amoroso y sus cerebros cortocircuitan con arranques de extrema violencia que pueden llegar a ser mortales. Está claro que ninguna "comunidad modelo" esconde nada bueno bajo su superficie de apariencia y postureo, pero en este caso, la experimentación con seres humanos les ha salido un poco rana. Algo parecido a lo que les pasaba a los super soldados de Hitler que pudimos ver en Overlord (2018).

Disturbing behaviour es una cinta de terror noventera surgida al rebufo del éxito cosechado por Scream (1996) o I know what you did last summer (1997) y, aunque parte de una premisa bastante diferente y sugerente, lo cierto es que decae en un desarrollo predecible y carente de interés. Una película para disfrutar un viernes por la noche, en el que no queremos exigirle demasiado a nuestro cerebro y queramos cumplir con nuestro afán de completismo de terror noventero. 

MORALEJA: Si vemos a un grupo de gente perfecta que viste igual y se comporta como personajes de una película de los años 50, huyamos muy fuerte porque o son juventudes nazis o son miembros de una secta muy turbia. 



LESSON OF THE EVIL (2012)



Lo cierto es que no he seguido muy de cerca la carrera del prolífico Takashi Miike, más que nada por falta de tiempo, pero descubrí Lesson of Evil gracias a unas publicaciones que hago en mi cuenta de instagram, en la que me gusta poneros pósters sospechosamente parecidos. El caso es que mientras investigaba sobre la película para la publicación, me llamó poderosamente su argumento y aproveché la primera oportunidad que tuve para verla. 

Lesson of Evil nos  introduce en la reunión de un grupo de profesores de instituto en la que se discute sobre los mejores métodos para combatir la creciente proliferación de chuletas en los exámenes en plena era tecnológica. Pronto destacan las ideas nada ortodoxas del atractivo y popular Hasumi Seiji que son rechazadas de plano por el consejo de profesores. Sin embargo, Hasumi, de pasado misterioso, está decidido a acabar con los alumnos que se pasan de listos, sea como sea.

La película nos muestra diferentes espacios temporales y, a medida que uno y otro van encajando y conseguimos tener una idea concreta de la situación, la cinta estalla en un tramo final verdaderamente gore y violento. La historia y los personajes evolucionan desde el buenismo y la corrección hasta adentrarse en el mismísimo infierno. No hay lugar para el arrepentimiento, ni la compasión en este psicokiller y cuando se vea acorralado, usará todos sus recursos para salir indemne de la situación.

MORALEJA: Ten cuidado con copiar en los exámenes o molestar en exceso a un profesor porque éste puede ser el mismísimo diablo.



THE FACULTY (1998)




En esta selección no podía faltar una de las películas icónicas del cine de terror de los 90 y que representaba una idea que a todos se nos había pasado alguna vez por la cabeza en nuestra época de estudiantes y es que nuestros profesores eran de otro planeta. 

Tras el éxito obtenido con From Dusk till Down o Abierto hasta el Amanecer (1996) como la conocemos en España, Robert Rodriguez, decidió probar suerte con el terror adolescente que tanto estaba de moda en los 90 y para ello contó para el guión con Kevin Williamson que ya había triunfado con Scream (1996) y Scream 2 (1997). Situaron a un grupo de adolescentes de lo más heterogéneo y lo metieron en un instituto venido a menos, con profesores quemados por la falta de presupuestos y alumnos incomprendidos tanto por sus progenitores, como por el sistema. Como guinda del pastel, decidieron darle un toque a lo Invasión de los Ladrones de Cuerpos (1956), dónde unos organismos extraterrestres empiezan a poseer y controlar al personal.

Si por algo The Faculty, se ha convertido en una película de culto es por el elenco de estrellas que aparecen en ella: Elijah WoodJosh HarnettUsher, Salma Hayek, Famke Janssen o Robert Patrick. Además, su tono gamberro, divertido y el alejamiento del patrón habitual del slasher, hacia un trama de ciencia ficción, pero igualmente protagonizada por adolescentes, convirtieron la propuesta de Rodríguez y Williamson en otro éxito.

El mensaje de esta película hacia las drogas es cuanto menos que curioso y es que utilizaban estupefacientes de fabricación casera, para mantener a los extraterrestres a raya. Ésta fue la razón por la que tras su estreno, fue duramente criticada, pero seamos realistas, Williamson se estaba riendo de nosotros y si ya le había dado una vuelta de tuerca al género de terror, ahora lo hacia con los thrillers de ciencia ficción. 

Los personajes habituales de las películas de adolescentes, aquí tiene un toque diferente: el capitán del equipo de fútbol quiere que se le valore por su inteligencia y no por su atractivo físico, el camello del grupo es el más inteligente de todos, el empollón no termina siendo tan cobarde como cabria esperar y se acaba ligando a la chica guapa y superficial que resulta ser bastante inteligente. La chica gótica e introvertida realmente lo utiliza como tapadera para evitar a personas cansinas y frívolas. Todos son bastante diferentes entre sí y lo que hacen los extraterrestres en precisamente anular esa individualidad y transformaros en autómatas con un objetivo común: liderar el mundo.

Una propuesta muy entretenida, refrescante y gamberra que se sigue disfrutando igual que el primer día y es perfecta para cualquier sesión cinéfila veraniega.

MORALEJA: Si tus profesores se comportan de manera extraña y autoritaria, puede ser que SÍ hayan sido infectados o abducidos por extraterrestres. 




TESIS (1996)




No podía faltar una de las joyas de la corona del cine español, en lo que a cine de terror y thillers se refiere. La ópera prima de un todavía desconocido Alejando Amenabar, nos dejó a todos con la boca abierta y nos despojó de nuestra inocencia al introducirnos en un mundo tan turbio como el de las cintas snuff (vídeos de asesinatos y torturas reales sin ningún tipo de efectos especiales)

Grabada en la Universidad de periodismo de la Complutense, con actores en ese momento poco conocidos como Ana Torrent o debutantes como Eduardo Noriega o Fele Martínez, arrasó en los premios Goya de ese año con una historia que criticaba duramente el trato de la violencia en los medios de comunicación.

La película nos ponía en la piel de Angela, una estudiante de Comunicación Audiovisual que trabaja en su tesis sobre la violencia en la televisión, cuando por azares del destino se encuentra con una cinta snuff. Movida por la curiosidad y su fascinación por estos actos macabros, Angela y un estudiante aficionado a la pornografía y al gore extremo, intentarán descubrir a los responsables que hay tras este red ilegal de películas y asesinatos cometidos única y exclusivamente para el disfrute de un publico sádico y sin escrúpulos. 

La trama, construida a modo thriller con mil giros en los que se señala a prácticamente a todos los personajes como posibles culpables, nos hará sentir verdadero terror en las escenas de persecución por los pasillos de la universidad y esa tensión al ver como el dúo protagonista se está metiendo en un tema muy turbio que les viene demasiado grande. Algunos profesores están metidos en esta trama hasta las cejas y es que se ve que necesitan un complemento a su sueldo y saciar sus impulsos sádicos.

Tesis fue una cinta que me impactó en su momento debido a mi corta edad, pero vista recientemente para este especial y con un bagaje de terror a mis espaldas bastante amplio, sigue resultándome un ejercicio de terror tremendamente disfrutable. Un estudio sobre la falta de moral de los medios de comunicación que no tienen ningún filtro a la hora de mostrar la violencia en pantalla porque "hay que darle al espectador los que quiere" y que, lamentablemente hoy sigue más vigente que nunca.

MORALEJA: Si el comportamiento de un profesor te parece altamente turbio y perturbador, cuidado, quizás sea miembro de una red de snuff y te esté fichando para ser su próxima victima.



Y, hasta aquí este especial sobre profesores mortíferos que agradecemos sólo existan en la ficción. Pero por si no habéis tenido suficiente como para poblar vuestras más terribles pesadillas por una larga temporada, también os recomiendo que le echéis un vistazo a The Woods (2006), Boarding School (2018) o, si no lo habéis hecho ya, la obra cumbre de las profesoras chungas, la gran Suspiria (1977).