Ésta es una de esas
películas de las que había oído hablar mucho últimamente y, como el Home invasion es un subgénero que me
suele entretener bastante, me decidí a verla hace un par de semanas. La verdad
es que fue un fin de semana un tanto curioso porque además de Intruders, vi otra película en la que
la protagonista era también una agorafóbica, por lo que me estoy volviendo una autentica
experta en la materia. La otra cinta era Musarañas
(2014), una de las mejores cintas de género español que he visto últimamente
y os aseguro que estoy viendo muchas, ¿por qué será?
Anna
es agorafóbica y por eso, cuando tres criminales asaltan su casa, ella no puede
escapar. Lo que los asaltantes no saben es que Anna no es tan frágil como parece y les va a poner las cosas bastante
difíciles.
A pesar de su extensa carrera como asistente de producción y
de dirección, Adam Schinder debuta como director con este thriller opresivo en el
que las apariencias engañan. En la producción cuenta con la colaboración de Brian Netto, junto al que escribió el
guion de Delivery: The Beast Within
(2014), una película bastante apreciada en el ámbito festivalero. En un
primer momento, la película recorrió el circuito de festivales bajo el título
de Shut in, pero puede que fuese
ante el inminente estreno de una película con el mismo título protagonizada por
Naomi Watts que se espera para este 2016, que decidiesen cambiarlo a Intruders. Tampoco es que se rompieran
la cabeza buscando alternativas, jejeje.
Creo que nunca
os lo había dicho, pero me encantan las frases promocionales que aparecen en
los poster de las películas como la escalofriante: “En el espacio nadie escuchará tus gritos” (Alien, 1979) o la advertencia: “No
les mojes, mantenlos lejos de la luz y no les des de comer después de
medianoche” (Gremlins, 1984) o
con la que aún me sigo estremeciendo a día de hoy: “Ya están aquí…” (Poltergeist,
1982). Pues bien, la frase que acompaña al título en esta cinta: “They should have left her alone”
(Deberían haberla dejado sola) también llama bastante la atención ya que desde
el principio estás intrigado intentando averiguar el por qué de tal afirmación y cuándo lo
descubres… no puedes estar más de
acuerdo, jejeje.
Intruders es una de esas cintas que intenta salirse un poco de
las pautas establecidas por el subgénero al que pertenece, introduciendo un
importante giro argumental en el último tercio de la película, del que depende
mayormente su éxito o fracaso. La verdad es que el giro es bastante original y
sorprendente pero creo no se sustenta del todo, principalmente por el personaje
de Anna. Con esto no quiero decir que
la actuación de Beth Riesgraf sea
mala, porque es la única que destacaría de todo el reparto, sino que la
psicología de su personaje carece de sentido. Cambia de víctima a agresora y
viceversa con una facilidad apabullante y, lo que ya es de traca, es que en
toda esta persecución por su casa, corriendo de un lado para otro otro, me cogen, me
escapo, Anna siempre luce perfecta. Supongo
que no todo el mundo se fija en estas cosas, pero a mí me chirrían muchísimo como
también me pasó con la chica que se iba a escalar con escote en Vertige (2009), totalmente creíble, ¡venga
ya! Pues como os decía, Anna va perfectamente
peinada y maquillada durante toda la película y el único desperfecto que tiene es
que a su espectacular vestido se le rompe una manga. ¡Qué tragedia!
Por otro lado, los
asaltantes tampoco me dijeron mucho ya que reproducen a la perfección los
estereotipos habituales en este tipo de películas. Uno de ellos es un psicópata que no dudará ni
por un minuto en hacer daño a Anna o
a quién se tercie, otro es el cabecilla y el que parece poner un poco de orden
en toda esta locura y, por último, tenemos a su hermano pequeño, un chico
sensible y débil. Algo que ya empieza a aburrirme porque suele ser habitual en
todos los home invasión, por muy
originales que pretendan ser en su argumento, es que siempre hay cierto tipo de
parentesco entre alguno de los asaltantes. Con esto, lo único que pretenden es
que cuando uno de ellos es agredido o muere, el enfrentamiento del resto con
las víctimas se convierta en algo personal que ya no tiene vuelta atrás. En
este aspecto, esta película no es diferente.
Resumiendo, Intruders es un Home invasion correcto, con buenas actuaciones, bien ejecutado y
con un giro argumental bastante original y dramático, pero al que le falta algo
de fuerza para convertirse en el peliculón que pretendía ser. No obstante, es
una opción bastante interesante y entretenida para disfrutar cualquier horror night, pero eso sí, solos en casa…