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viernes, 9 de abril de 2021

ZOMBIES MOMENTS: THE RETURN OF THE LIVING DEAD (1985) / NIGHT OF THE CREEPS (1986)


Hay que retomar las buenas costumbres y ya hacia años (qué rápido pasa el tiempo) que no os traía este double feature de cine zombi. La verdad es que es un género que disfruto bastante porque refleja muy bien los miedos y ansiedades de una cultura o de un periodo de tiempo determinado. Esa es la razón por la que en las películas de zombis de los años 30 y 40 el origen de las criaturas estaba en el vudú y las historias se desarrollaban en lugares exóticos. A finales de los 60 y hasta los 80 con el ciclo de Romero, los zombis se acercan a nuestros hogares, no tienen ningún amo, se mueven por el instinto de comer carne humana en hordas enormes entre los que podía estar tu padre o tu vecino y en los 2000 llegaron los infectados, las pandemias y los zombis rápidos.

Para esta ocasión, he elegido dos comedias zombis de los años 80 que me parecen estupendas y que deberían estar en cualquier lista de este subgénero porque su revisión del mito, su parodia tanto de Night of the Livind Dead en el primer caso, como de las películas de ciencia ficción de los 50 y los slashers de los 80 en el segundo son toda una delicia. 


THE RETURN OF THE LIVING DEAD (1985)


A mediados de los años 80, los espectadores estaban ya bastante acostumbrados a los muertos vivientes, tras el éxito de cintas como Night of the Livind Dead (1968), Dawn of the Living Dead (1978) y, sobre todo, el icónico videoclip de Michael Jackson, Thriller (1983)  que los acercó al gran público. A partir de este momento es cuando empiezan a surgir películas con esta temática, con un tono más desenfado y aptas para un público más amplio (PG-13). El cine zombi se despoja así de la critica social, el tono triste y dramático que caracterizaba a las películas de Romero, para convertirse en productos de entretenimiento divertidos y disparatados. Y, en este contexto es en el que aparece la ópera prima de Dan O'Bannon, conocido por ser el co-guionista de Dark Star (1974), junto a John Carpenter, pero sobre todo por ser el creador de Alien (1979) junto a Ronald Shusset.

La idea para el guion de The Return of the Living Dead surge como una secuela a Night of the Living Dead que tuvo su co-guionista, John Russo. En un primer momento iba haber sido dirigida por Tobe Hooper, pero debido a problemas legales acerca de quién tenía los derechos sobre la denominación de "Living Dead" para sus películas, este proyecto se retrasó unos años y acabó cayendo en manos de O'Bannon que reescribió el guion dándole un tono paródico.

The Return of the Living Dead nos presenta a dos trabajadores de un almacén de suministros médicos dónde uno le relata al otro que los hechos descritos en la película de Romero estaban basados en hechos reales, pero que el gobierno y el ejercito los ocultaron. Algunos de esos zombis permanecen disecados en barriles sellados y casualmente, debido a un error, uno de esos barriles fue a parar al almacén. Cuando el veterano Frank quiere fardar de la historia ante su aprendiz y le enseña el barril, accidentalmente liberan un gas muy especial y a un zombi con ganas de comer cerebros. El gas es especial porque revive a los muertos, haciendo que estos salgan de sus tumbas y, ¡oh casualidad! el almacén está situado muy cerca de un cementerio, pero si son los vivos los que inhalan este gas, sus funciones vitales se van apagando hasta convertirse en vivos-muertos. A partir de aquí, se monta un lio tremendo cuando también un grupo un tanto heterogéneo de amigos va al lugar a buscar al aprendiz y para hacer tiempo se divierten en el cementerio, cuando los zombis empiezan a salir de sus tumbas y a comerse sus cerebros.  

Aunque la parte más icónica y que más recordamos de esta película es el striptease gratuito y el sensual baile de la punky Trash sobre la tumba de Archibald Leach, el verdadero nombre de Cary Grant, mis partes preferidas son cada uno de los diálogos e intervenciones de Frank y su aprendiz, Freddy, interpretados por James Karen del que me declaro muy fan y Thom Mattews respectivamente. Cuando se dan cuenta de la que han liado con la liberación de este gas y llaman al jefe para que les ayude a resolverlo, sus interpretaciones totalmente  histriónicas, pasadas de rosca y muecas, son puro delirio. 

Cada una de las decisiones que se toman en la película para librarse de los zombis: quemarlos en una incineradora o el plan de contención de los militares provocan que la situación empeore todavía más y que prácticamente lleguemos a la conclusión de que no hay escapatoria posible a este mal, aunque sea entre risas y diversión. 

Según me parece recordar, esta película es la que popularizó la ingesta de cerebros en la comunidad zombi y es que escuchar: "ce-reeee-bro", alargando esa "e" nos retrotrae a ese zombi que parecía haber salido de un bidón cargado de chapapote y que tenía más articulaciones que cualquier ser vivo que conozcamos. Las caracterizaciones de los zombis, así como los animatrónicos usados son excepcionales y es difícil quedarse con un solo. Sus funciones son mas variadas de lo habitual, ya que además de correr para alcanzar a sus víctimas, algunos son capaces de mantener breves conversaciones o de idear estrategias para conseguir nuevas víctimas, como el zombi que pide más sanitarios por la radio de la ambulancia. 

The Return of the Living Dead no escatima en gore, desnudos integrales, música discotequera, performances en cementerios porque llegados a este punto, al guionista y a nuestros personajes les vale todo. Una comedia de terror tremendamente divertida, con un guion que funciona en todos los niveles, principalmente por contar con unos personales excepcionales y unos diálogos que parecen sacados de Airplane! (1980).  La película cosechó un éxito increíble y tan solo en su fin de semana de estreno consiguió amortizar el presupuesto de 4 millones de dólares. Esta acogida propició dos secuelas, de las que recientemente he visto la de 1987 y que sinceramente creo que no aporta nada nuevo a la saga. La historia es prácticamente la misma, conservando a la dupla de Frank y Freddy y añadiendo nuevas víctimas potenciales, entre las que ahora hay niños pistoleros, pero el argumento es el mismo porque se ve que los militares perdieron muchos de estos bidones con zombis dentro, jejeje. 




 NIGHT OF THE CREEPS (1986)


Confieso que por Night of the Creeps siento un cariño especial y no sabría deciros la de veces que la he visto porque siempre me parece buen momento para esta mezcla de comedia de terror y ciencia ficción tan genuina. Todo un homenaje a la serie B de los años 50 con sus invasiones alienígenas y a los slashers de los 80, ambientados en institutos con sus hermandades, fraternidades, fiestas y bailes de graduación. Y, qué mejor tributo que poner al icónico e inigualable Tom Atkins frente a uno de los papeles principales y que tiene las mejores frases de toda la película.

Otra ópera prima, en este caso de Fred Dekker que no sólo dirige, si no que también escribe el guion. Dekker dirigió otra película icónica de los 80, Monster Squad (1987), pero ha sido más prolífico es su labores como guionista en cintas como House (1985), Ricochet (1991) o las más reciente Predator (2018).

Volviendo a Night of the Creeps os diré que cuenta con un prólogo doble. En la primera parte vemos como unos alienígenas liberan a la atmosfera un artefacto y en la siguiente, ambientada en 1959, en riguroso blanco y negro, el artilugio llega a la Tierra en forma de una gran bola de fuego, unos jóvenes van a investigarlo y la babosa que contenía el artefacto invade el cuerpo de uno de ellos. Tras este impactante comienzo, nos trasladamos unos años después, hasta 1986, dónde conocemos a Chris y JC, dos adolescentes que para entrar en una hermandad tienen que robar un cadáver del laboratorio de ciencias del campus, pero acaban liberando al huésped criogenizado que contiene el parásito alienígena. A partir de aquí, el parásito se extiende por el campus convirtiendo a los estudiantes en zombis y para tratar de solucionar las cosas, nuestros jóvenes amigos contarán con la inestimable ayuda del avinagrado detective Ray Cameron y la chica de los sueños de Chris, Cynthia, una prima de Ripley con lanzallamas en mano.

El modus operandi de estos parásitos con forma de babosa es muy similar al del gas de The Return of the Living Dead: reviven a los muertos, pero a los vivos los convierte a su vez en muertos vivientes, sin pulso, ni latidos. Se meten por la boca de sus víctimas, incuban huevos en el cerebro de ésta y se reproducen. Pasado un tiempo, las cabezas explotan liberando a un un puñado de babosas dispuestas a infectar el mundo. Así que tendremos desde zombis universitarios con sus galas para el baile de graduación, hasta gatitos revenidos o muertos vivientes con hacha en mano y multitud de cabezas explotando. Todo un festival de gore y viscosidad muy divertido y cargado de humor negro que hace las delicias de cualquier espectador con ganas de pasar un buen rato.

Dekker escribió el guion de la película en tan solo una semana y tenía la fuerte convicción de que si no dirigía él mismo la película, no le iba a vender el libreto a nadie. Así que menos mal que Tri-Star estuvo viva y decidió producirla con él al frente porque no me querría haber perdido esta joya por nada del mundo. Entre los muchos homenajes que hace Night of the Creeps, creo que a nadie se le escapa que todos su personajes tiene el apellido de un reconocido director de cine de terror de la época como: Cronenberg, Cameron o Carpenter. Este carácter autoconsciente de la película que se permite el lujo incluso de hacer varios homenajes a la película de Plan 9 from the Outer Space (1957), incluir en su reparto a Dick Miller, en un personaje con el mismo nombre que tenía en A Bucket of Blood (1959) o incluir líneas de diálogo como: "¿Esto es un asesinato u otra mala película de Serie B?", es sin duda precursora de lo que años después veríamos en Scream (1996).

Existen dos finales para Night of the Creeps. Uno es el que llegó a los cines porque cuando le presentaron a los productores el que Dekker tenía en mente, todavía estaba inacabado y no les gustó, así que decidieron acortarlo con una babosa que salía de la boca de un perro zombi, mientras los protagonistas veían arder la hermandad. El final original que es el que yo siempre he visto y que aparece en la versión para televisión y DVD es uno tremendamente parecido al de The Return of the Living Dead.




Espero que disfrutéis de esta doble sesión que os propongo con las que para mi no son sólo de las mejores comedias de Terror Zombi, si no también de las mas influyentes. Dado su carácter desenfado y divertido también son perfectas para esas personas a las que queremos ir introduciendo en el Terror poco a poco, sin grandes traumas, para ir afianzando el camino porque claro, si les ponemos de repente Martyrs (2008) o Evil Dead (2013), les perderíamos para siempre, jejeje.


jueves, 4 de marzo de 2021

LAS 101 JOYAS DESCONOCIDAS DEL CINE DE TERROR SEGÚN FANGORIA



No hay nada que me produzca más satisfacción que descubrir listas de películas de terror desconocidas o infravalorados. Para mi son como pequeños tesoros que estoy deseando abrir y descubrir. Como muchos ya sabréis, Fangoria es una de las revistas más longevas y prestigiosas sobre cine de Terror. Desde su fundación en 1979, nos han proporcionado infinidad de artículos, entrevistas, noticias y especiales sobre películas, videojuegos, libros o cualquier aspecto del entretenimiento más terrorífico. 

En 2011 se publicó una guía en la que varios de sus expertos eligieron las 101 mejores películas de Terror desconocidas para el aficionado medio del cine de género. Digo esto porque los auténticos Horror Lovers conocemos la gran mayoría y hemos visto muchas de las películas que nos proponen. Entre ellas podemos encontrar cintas que fueron desechadas por los distribuidores, fracasos iniciales, películas extranjeras (que ya sabemos que eso para los norteamericanos ya es una rara avis en sí misma) o producciones directas a vídeo que esperaban pacientemente ser descubiertas. También encontraremos las películas de directores de renombre que dada su fama, quedaron eclipsadas.

Os he contado todo este rollo porque me ha parecido una gran idea que juntos vayamos descubriendo las películas que Fangoria nos propone y valoremos sí son verdaderas joyas del Cine de Terror. Será un especial que vaya haciendo poco a poco dada su gran envergadura y siempre en artículos de 5 películas, para que no se nos haga muy pesado. 

Dicho esto, empezamos con las primeras 5 películas que nos proponen que casualmente ya había visto, pero he querido revisionar las que tenía más olvidadas para poder hablar de ellas como se merecen.



ALICE SWEET ALICE (1976)


Esta película es toda una joya del cine de Terror sententero y es considerada por muchos críticos como la película más Giallo de producción norteamericana, aunque su director confesara en ese momento, que no había visto nada de Dario Argento.

La película, ambientada en la católica y conservadora Paterson, Nueva Jersey, durante los años 60, nos presenta a Karen, una niña de 9 años que va a celebrar su primera comunión y recibe todo tipo de atenciones y regalos por parte de su madre y el joven párroco de la comunidad. Éste trato privilegiado molesta bastante a su celosa hermana Alice que se divierte fastidiando no sólo a su hermana, si no a quién se le pone a tiro. Por eso, cuando Karen es asesinada, todas las sospechas recaen sobre su celosa hermana. El padre biológico de las niñas que había rehecho su vida con otra mujer, regresa para apoyar a su ex en estos duros momentos y localizar al asesino porque está convencido de que Alice no es la responsable.

El libreto de Alice Sweet Alice corre a cargo de Alfred Sole y de su amiga y vecina en Paterson, Rosemary Ritvo, aunque a los mandos de la dirección sólo estaba Sole. El germen de esta película obedece a dos factores: uno, la influencia que ejerció en el director la película Don't look now (1973), de la que claramente tomo la idea del impermeable amarillo del asesino y la excomulgación de Sole de la diócesis de Paterson, a raíz de los cargos por obscenidad que recibió su anterior película Deep Sleep (1972), de claro contenido erótico. De ahí es de dónde viene todo ese ambiente anticatólico que respira la película y la decisión de no señalar a influencias demoniacas como responsable de los crimenes mundanos, si no al fanatismo y represión católica que tantos disgustos y matanzas han provocado

Una película que funciona como un giallo, en el sentido de que tenemos al padre de las niñas investigando por cuenta propia el asesinato de su hija, desoyendo las acusaciones y diagnósticos de policía y médicos que apuntan a Alice como única culpable. Por otro lado, tenemos a un asesino enmascarado con un careta bastante espeluznante: una especie de recreación de una muñeca, traslucida que da bastante grima.

Brooke Shields hizo su debut cinematográfico en esta película y dada la fama que alcanzó posteriormente con The Blue Lagoon (1980), cuando la película fue reeditada en 1981, se cambió el poster para utilizar su imagen como reclamo, a pesar de que en Alice Sweet Alice, sale apenas 20 minutos. La verdad es que su personaje es de los pocos adorables que tiene la cinta, porque de raros y odiosos anda sobrada. En primer lugar, Alice, a la que da vida una excelente Paula Sheppard que contaba por aquel entonces con 19 años, interpretando a una joven de 12, acaba de perder a su hermana víctima de una asesinato bastante macabro y ella no siente absolutamente nada. Como buena psicópata que es o acabará siendo en un futuro, en vez de llorar las penas, se dedica a hacerle la puñeta a su vecino, el desagradable Sr. Alphonso. Digo desagradable, por no llamarle otra cosa, ya que protagoniza una de las escenas más turbias de la cinta, cuando intenta propasarse con la perturbada, pero todavía niña, Alice.  También la tía de la criatura que ha llegado a la casa para ayudar a su hermana con el duelo, parece odiar a todo el mundo, especialmente a Alice de la que está segura es la asesina de su hermana. Así que salvando a los padres de las niñas que tienen unos momentos de resurgimiento romántico, muy a la italiana y el joven párroco que tiene un claro enamoramiento platónico de la madre, el resto de los personajes de la historias son bastante odiosos, por no decir detestables.

En definitiva, lo que más me atrae de Alice Sweet Alice es su imaginería religiosa tan inquietante, la sordidez del Sr. Alphonso, la frialdad de Alice, los asesinatos tan macabros y su retrato de un cristianismo radical asentado en la represión, las envidias y la hipocresía. 


ALONE IN THE DARK (1982)


Una de esas rareza del cine ochentero que quedó sepultada por el éxito de los slashers de asesinos enmascarados que masacraban adolescentes inmaduros compulsivamente. Aunque se la suele encasillar dentro de este subgénero, lo cierto es que yo la considero más una película de venganza que se acaba transformando en todo un survival. Es cierto que cuando los perturbados escapan de la institución psiquiátrica en la que estaban internos, dejan tras de sí un reguero de muertos y damnificados, pero tan sólo porque es el camino que les separa del objeto de su venganza.

Ópera prima de su director, Jack Sholder que también participó en la elaboración del guión y que años después nos traería otro título de culto para el fantástico, como es Hidden (1987). A grandes rasgos, la película trata sobre un grupo de internos de un psiquiátrico que se escapan de la institución, tras un corte de luz que tira por tierra todo el sistema de seguridad. Obsesionados con la idea de que el nuevo psiquiatra ha asesinado al anterior para ocupar su puesto, este grupo formado por cinco psicópatas bien definidos por las particularidades de su demencia, deciden acudir a la casa del nuevo doctor para vengarse por la supuesta muerte de su anterior psiquiatra.  

Los temas que se tocan en Alone in the Dark son bastante más profundos que los que suelen darse en un slasher prototípico. Aquí se desarrolla la idea de lo fina que es la capa que separa a los cuerdos, de los locos. La institución psiquiátrica en la que va a empezar a trabajar nuestro protagonista se distingue por la indulgencia en las técnicas, hasta con los pacientes más peligrosos que emplea su director. Un espléndido Donald Pleasence que en muchas ocasiones hasta nos hace dudar de que él mismo, sea uno de los los internos. Por otro lado, la familia de este nuevo psiquiatra, perfectamente normal y para nada violenta, tendrá que hacer todo lo posible para sobrevivir cuando estos locos asalten su casa, hasta el punto de  convertirse en asesinos, si fuera necesario. 

Si por algo destaca esta película es por un reparto excepcional. El grupo de pacientes que escapan de la institución está formador por: un ex soldado esquizofrénico y paranoico interpretado por Jack Palance, un párroco con tendencias pirómanas al que da vida Martin Landau, un abusador de menores y The Bleeder, un asesino que oculta su cara tras una máscara de hockey y que sangra por la nariz siempre que quiere cometer un crimen. Aunque estos dos últimos actores no son conocidos, para el papel de nuevo doctor del psiquiátrico, tenemos a Dwight Schulz, más conocido como Murdock del Equipo A (1983-1987), para todo aquel que se criase en los 80.

Como dato curioso, deciros que para la escena de la pesadilla final contaron con el artesano en efectos especiales, Tom Savini, con el que Sholder había trabajado en la grandiosa, The Burning (1981).

Alone in the Dark fue la primera película producida por la New Line Cinema, que ya había visto el filón del mercado de cine de género cuando se dedicaba exclusivamente a tareas de distribución. A esta productora, hoy en día absorbida por la Warner, le debemos sagas como A Nighmare on Elm street, Critters o The Texas Chainsaw Massacre

Considero que Alone in the Dark es una cinta que merece ser rescatada, no sólo por su reparto espectacular y sus guiños a películas como Halloween (1978) o Friday the 13th (1980), si no porque aborda temas o nos pone en situaciones mucho más complejas de las que se perciben a simple vista: el turbio pasado de la hermana del psiquiatra, la permisividad de instituciones mentales que pretenden que los internos sean más colegas que pacientes, las frágiles medidas de seguridad del centro y cómo en un país desarrollado como EEUU, un corte de luz a nivel municipal, puede acarrear disturbios violentos generalizados....


APT PUPIL (1998)


Apt Pupil o Verano de Corrupción, como se la conoce en España es una película que me perturba y me entristece terriblemente, no sólo por la historia que nos cuenta, si no por el trágico final de su protagonista, Brad Renfro que moriría a la temprana edad de 25 años.

La película está basada en uno de los cuatro relatos que forman parte de la antología de Stephen King, Las Cuatro Estaciones (1982) y que cuenta con otras dos historias adaptadas con éxito al cine como son: The Shawshank Redemption (1994) y Stand by me (1986). La realización de esta película fue un sueño cumplido de su director Brian Singer que desde que leyó el libro en su adolescencia, siempre había querido adaptarlo a la gran pantalla y tras el éxito que obtuvo con su ópera prima, The Usual Suspects (1995), puedo llevarlo a cabo. La trayectoria de Singer continuó es ascenso, en primer lugar con las películas de la saga de X-Men, pero sobre todo, por su trabajo más reciente hasta la fecha, la multipremiada, Bohemian Rhapsody (2018).

Apt Pupil nos muestra de una manera bastante gráfica, cómo el mal puede corromper a la mente más brillante e inocente. Un joven de 14 años, atraído por la ideología nazi, descubre que unos de sus vecinos es uno de los criminales más sanguinarios de la Segunda Guerra Mundial y ahora vive en su vecindario bajo una identidad falsa. El chico chantajea al anciano porque quiere que éste le cuente de primera mano las historias de la guerra que no le cuentan en el colegio, ni aparecen en los libros, a cambio de no denunciarle ante las autoridades. A partir de aquí, se inicia una relación de manipulación en ambos sentidos, bastante enfermiza que tendrá consecuencias terribles. Por un lado, el evocar viejos recuerdos e ideales que habían permanecido enterrados durante años, provocan que el monstruo que albergaba el interior de Arthur Denker/Kurt Dussander vuelva a despertase y al mismo tiempo, estas historias de torturas, vejaciones y asesinatos insensibilizan al chaval que poco a poco se va convirtiendo más que en un nazi, en un psicópata controlador y despiadado.

El guion que fue adaptado por Brandon Boyse, se aleja bastante de la novela en su tramo final. El relato de King concluye de una manera mucho más contundente, con una espiral de violencia a manos del propio chaval ya en su edad adulta que aquí sí que se ha convertido en todo un nazi, no sólo por sus impulsos homicidas, si no por los comentarios racistas que vierte sobre su novia judía. Por el contrario, aunque la adaptación de Boyce termina de una forma menos drástica en la que el chaval se ha vuelto un manipulador, pero parece que su maldad no va a ir a más allá, sigue poniendo los pelos de punta. 

Las actuaciones de ambos, especialmente la de Ian McKellen, son muy convincentes. Es todo un espectáculo ver la transformación que sufre el personaje de McKellen que pasa de ser un anciano decrépito de un apacible barrio residencial americano, a un ser despiadado, cruel y mucho más erguido que no se arrepiente de sus atrocidades del pasado. 

Aunque la historia que desarrolla la novela y la película son ficticias, esconden su parte de verdad. Durante la caída del Tercer Reich, mucho altos cargos nazis, especialmente científicos, fueron indultados y introducidos en la sociedad estadounidense mediante identidades falsas en la denominada Operación Paperclip. De hecho, tenéis disponible en Netflix, un true crime llamado The Devil next door (2019), sobre un entrañable ancianito estadounidense que fue identificado como Ivan El Terrible, un sanguinario operario de cámara de gas en los campos de exterminio de la Segunda Guerra Mundial. Si por el contrario preferís algo de ficción más gamberra, porque el True Crime es bastante duro, en Prime Video tenéis también la serie Hunters (2020), protagonizada por Al Pacino, sobre cazadores de nazis en suelo norteamericano durante la segunda mitad del s. XX.

En definitiva, Apt Pupil es una película que me fascina por sus similitudes con la realidad y al mismo tiempo me deja un poso de tristeza muy grande en el corazón. El mal nunca muere y puede terminar pudriendo a todo lo que está a su alrededor.



THE ASPHYX (1973)

The Asphyx es toda una rara avis del terror gótico británico que merece ser rescatada por su original visión del Mad Doctor, la inmortalidad y los experimentos para cambiar los designios divinos. 

Un rico científico de la época victoriana, aficionado a la fotografía, descubre una especie de bruma que aparece en las fotos cerca de la personas, cuando éstas están próximas a la muerte. Tras un trágico accidente descubre que este borrón no es alma de la persona abandonando el cuerpo, si no que es el Asphyx, un espíritu de la mitología griega que aparecía para llevarse a la persona al inframundo. Poseído por la idea de burlar a la muerte, nuestro científico fabrica un dispositivo capaz de atrapar a estos espíritus y así convertir a esas personas en inmortales. Sin embargo, el invento no parece funcionar del todo bien y cegado por la ambición y la arrogancia, este ingenuo mad doctor acabará provocando una serie de consecuencias devastadoras para toda su familia.

La película está ambientada en la impresionante mansión de la familia Cunningham dónde vive este prestigioso y respetado científico junto a sus hijos y su futura esposa. El interior de la casa nos trasporta a esa imagen que tenemos de la época victoriana con salas repletas de estanterías atestadas de libros, instrumental científico, retratos en blanco y negro y relojes de pie. Un ambiente científico intelectual que nos recuerda mucho al de la novela de  Frankenstein. Toda la acción se desarrolla en este entorno y le otorga a la película una apariencia bastante teatral.  

En la película no existe ningún villano, ni monstruo como tal, si no un espíritu, el Asphyx, al que ahora identificaríamos como la Muerte que viene a buscar a sus futuras víctimas porque les ha llegado su hora. No existe ninguna maldición, ni ningún oscuro designio, la muerte se limita a perpetuar el orden natural de las cosas. Lo que sí tenemos es un científico que cegado por el dolor y la tragedia realiza experimentos imprudentes que van más allá de su propia capacidad intelectual y cuya ambición lo acabará devorando. 

El diseño del Asphyx es bastante gracioso, una especie de holograma azulado que representa lo que a mi me parece una momia con la boca abierta y aspecto amenazador. La verdad es que me recordó bastante a los fantasmas verdosos de los Cazafantasmas, jejeje.

A pesar del gran trabajo de dirección y cinematografía que desprende The Asphyx está fue la única película que dirigió Peter Newbrook. El cineasta británico dedicó la mayor parte de su carrera a tareas de producción, cinematografía y operador de cámara en clásicos como The Bridge on the river Kwai (1957)Lawrence of Arabia (1962).

Más que una película de terror considero a The Asphyx como un drama de proporciones astronómicas con ciertas dosis de ciencia ficción. Una película interesante, sin villano, de ritmo pausado, con algún giro en la trama, sin demasiados sobresaltos que nos transporta a esa época en la que era plausible pensar en capturar el alma de alguien y convertirla en inmortal o juntar pedacitos de personas y crear un autómata. Una época donde los espíritus, las maldiciones formaban parte de la vida cotidiana y la inocencia ante lo desconocido era entrañable. 


THE BEYOND (1981)



Me es imposible no amar muy fuerte la trilogía extraoficial de las Puertas del Infierno de Fulci, especialmente su segunda parte. The Beyond o mejor con ese título tan maravillo que los italianos le ponían a sus gialli y películas de terror... E tu vivrai nel terrore! L'Aldilà es una cinta de terror que tiene una ligera coherencia argumental pero que sin embargo, su potencia a la hora de crear una atmósfera de pesadilla infernal, sigue funcionando a día de hoy como un tiro. La intensidad y el efectismo de la violencia y el gore en muchas de las escenas provocaron su censura en varios países y su ascensión a los altares del culto.

La historia gira en torno al hotel Seven Doors en Luisiana. La primera escena nos lleva a 1927, cuando una multitud mal encarada se dirige al hotel con antorchas y cadenas para dar muerte de una forma muy sanguinaria y atroz a Schweick, un artista al que acusan de brujería y haber traído una maldición al hotel y la ciudad. Su muerte abre una de las siete puertas del Infierno que estás esparcidas por el mundo y que permite a los muertos pasar al mundo de los vivos. Acto seguido, la acción nos traslada a la época actua en 1981, dónde Liza Merril, una neoyorquina que no tiene ni idea del pasado del hotel, lo ha heredado y lo ve cómo su última oportunidad para prosperar en la vida. Sin embargo, los trabajos de acondicionamiento del hotel activan el portal maldito y junto al médico del pueblo, su interes romántico, se enfrentarán no sólo a los muertos vivientes, si no a una infinidad de males que podrán contra las cuerdas a la desdichada pareja.

Habré visto The Beyond como tres veces y siempre tarda días en irse de mi memoria porque no paro de darle vueltas a su significado. Aunque la sinopsis de la película es a grandes rasgos la que os he señalado, hay muchas escenas que no aportan contenido a la historia, pero que están ahí por su impacto o para el despliegue de la artesanía gore de la que presume la película. Escenas como aquella en la que a la madre de una niña se le cae un liquido corrosivo encima. ¿Qué provoca que esa mujer esté petrificada en el suelo y que el líquido le caiga sobre la cara? Ni idea porque todo sucede fuera de cámara, pero da igual porque la escena es fantástica e impactante. Otra secuencia que también está insertada por la potencia de su escena gore es en la que la mujer ciega está rodeada por cadáveres que simplemente se quedan mirándola como figuras de cera y en un momento dado, ella le dice a su perro lazarillo que los ataque y se acaba liando muy parda porque el perro se zombifica, fuera de pantalla y la ataca a ella. No le encuento mucho sentido a esta escena en el conjunto de la historia, pero ¿no os parece enigmático que el perro la muerda la yugular y una oreja? Es decir, la víctima es una mujer ciega a la que acabas de dejar sin otros dos sentidos: el habla y el oido. 

La combinación de la belleza, el horror y la música en The Beyond me resulta totalmente hipnótica y nos traslada como en un mal sueño a ese mundo infernal. Tanto aquí como en City of the Living Dead dónde también aparece Catriona MacCall, pero en un papel diferente, abundan los primeros planos de los personajes totamente en sombras, tan sólo iluminados por una banda de luz sobre sus ojos. Los planos en sí son de una belleza expectacular, pero al mismo tiempo esta imagen transmite una sensación de inquietud y temor muy potente. Lo mismo pasa con una de las secuencias más icónicas de toda la cinta, aquella panorámica en la que la protagonista viaja por una carretera totalmente desierta y se detiene al ver a una mujer y su perro en medio de la calzada. Cuando se cierra el plano vemos que la mujer de gran belleza está ciega y su mirada nos pone los pelos de punta.

Sólo se me ocurren palabras de alabanza para esta película en la que encontamos de todo, desde demonios, hordas de zombis, arañas carnivoras o libro maldito hasta la revelación de lo que hay al otro lado de la puerta del infierno. No se ha escatimado en escenas sangrientas con una especial predilección por los rostros derretidos y los ojos que salen de las orbitas. Una joya sin duda del cine de terror, aunque para nada desconocida entre los aficionados al género.


jueves, 11 de febrero de 2021

WIHM: MESSIAH OF EVIL (1973)

 


Seguimos en el Woman in Horror Month con una película que llevaba tiempo queriendo ver porque aunque no es de las cintas más conocidas, sí que suele aparecer en casi todas las listas de las mejores películas de terror dirigidas por mujeres. Messiah of Evil es una película enigmática, con una atmósfera totalmente onírica en la que muchas veces no sabremos si estamos viendo la realidad o las pesadillas de alguno de los personajes, deja más interrogantes que respuestas, pero a pesar de ello resulta fascinante. Os confieso que he tenido que verla dos veces para tratar de entenderla y ahora tengo tantas cosas en la cabeza de las que os quiero hablar que a ver si soy capaz de ordenar mis ideas y no convertir esto en una locura, jajaja.

En esta ocasión, la autoría de la película está compartida. Gloria Katz y su marido, Willard Huyck escriben, dirigen y producen esta película, aunque el trabajo de Glorian Katz no aparece acreditado. Messiah of Evil era la única película que habían hecho cuando George Lucas, compañero de universidad de Huyck, les contrató para el guión de American Graffity (1973). A partir de aquí, su carrera despegó, principalmente en el mundo del guión y la producción con películas como Indiana Jones and the temple of the Doom (1984) o Howard the duck (1986). Como veis en el título, la película fue estrenada en 1973 pero 10 años después se reestrenó bajo el nombre de The Dead People porque la MPA (Movie Picture Association of America) les prohibió usar la palabra Mesías porque según ellos, provocaba confusión.

Volviendo a Messiah of Evil fue un película de bajo presupuesto que arrastró varios problemas en la producción y pos producción, lo que acabó convirtiéndola en una película inacabada y con algunos problemas de cohesión: subtramas que se abandonan o personajes flojos. Sin embargo, lejos de desmerecerla, esto "fallos" de cohesión contribuyen a darle al conjunto una patina de surrealismo y extrañeza que la convierten en una película muy interesante. No me extraña en absoluto que haya ascendido a las esferas del culto porque es una obra de lo más enigmática.

Basada ligeramente en el relato de H.P. Lovecraft, The Shadow over Innsmouth (1931), Messiah of Evil comienza con el degollamiento de un hombre a manos de una chica. Tras esto, conocemos a Arletty, una joven que se dirige a Point Dune, en la costa de California porque lleva tiempo sin saber nada de su padre, un artista que se había retirado allí para pintar. Una vez en el pueblo, empiezan a sucederse situaciones extrañas tanto con los lugareños, como con el entorno: un inquietante episodio en la gasolinera, la extraña casa de su padre con pinturas de figuras humanas en blanco y negro que cubren la paredes, el encuentro con un peculiar trío de viajeros, Thom, Laura y Toni, que pasan el tiempo escuchando leyendas de la zona y que acabarán instándose con ella en la casa de su padre. Gracias a la historia que les cuenta un lugareño descubren la leyenda del forastero oscuro. Un personaje que 100 años antes había bajado de la montañas cuando la luna se volvió roja, proclamando una nueva religión con tendencias caníbales que vino acompañada de cosas terribles. El forastero anunció que volvería un siglo después, cuando la luna volviese a teñirse de rojo.

Estos 100 años están a punto de cumplirse y los lugareños parecen estar poseídos por una especie de mal que los obliga a quedarse catatónicos mirando a la luna, esperando expectantes con hogueras en la playa o persiguiendo y "matando" a estos forasteros que han llegado a su pueblo. Es muy curiosa la caracterización de estos infectados porque a parte de sangrar por los ojos, un peculiar gusto por la carne cruda, una expresión hierática e ir bien vestidos, pasarían perfectamente por personas normales. Su representación recuerda mucho a Night of the Living Dead  (1968) de George A. Romero. Otra de las cosas que me llamaron poderosamente la atención es que casi todos los infectados van vestidos de traje, como si acabaran de salir de una boda, en contraposición con Arletty y el trío protagonista que representan una imagen más bohemia, hippy y libertina. Desconozco si esto es un indicativo de una lucha de clases, pero casualmente las figuras pintadas por el padre de Arletty en la casa se corresponden con la estética de estos infectados. 



Aunque todo en Messiah of Evil es fascinante, me gustaría destacar sus 3 escenas más icónicas porque tiene bastante miga. En primer lugar, cuando Laura decide marcharse de la ciudad porque no le gusta el comportamiento de Thom con la recién llegada Arletty y es recogida por una camioneta conducida por el personaje mas enigmático de toda la película. Éste está interpretado por el actor afroamericano albino, Bennie Robison, cuya inexpresividad y mirada desviada, le otorga una aire espeluznante que se incentiva cuando descubrimos su gusto por la ingesta de ratas vivas. Para más inri, lleva a un grupo de personas sentadas en la parte de atrás de la camioneta, totalmente estáticas y con la cabeza inclinada hacia arriba, entiendo que expectantes a que la luna se tiña de rojo. Un hecho que me pareció de lo más inquietante, pero que los personajes que lo presenciaron, no parecían darle mucha importancia.

Pasamos de esta escena casi automáticamente a otra que me interesa y que tiene lugar en el supermercado al que huye Laura, tras escaparse la camioneta. El lugar parece desierto, hasta que la joven gira uno de los pasillos y se encuentra con un gran grupo de autóctonos comiendo carne cruda directamente del contenedor de refrigeración  y cuando detectan su presencia, empiezan a perseguirla. La localización en un entorno comercial nos recuerda al que años después usaría George A. Romero en Dawn of the Dead (1978) y que aquí desconozco si pretende ser una crítica contra el consumismo excesivo porque en Messiah of Evil todo es un enigma, jajaja.

La última escena de las que os quería hablar y que como cinéfila, me fascina es la que tiene lugar en una sala de cine a la que acude la otra joven viajera, Toni para vencer el tedio que le supone su estancia en el pueblo. La chica entra en una sala prácticamente vacía y a media que avanza el Western que se está proyectando, la sala se va llenando a sus espaldas de lugareños hieráticos que sangran por los ojos. El ruido de la película y la situación tan surrealista que se da y al mismo tiempo tan terrorífica, la convierten en una escena que permanecerá para siempre grabada en mi memoria.

También es muy relevante en Messiah of Evil, el uso de la voz en off tanto de la propia protagonista, como del padre desaparecido, a través de los diarios que la joven encuentra en la casa: Estos narradores con ese tono de voz tan escalofriante, no sólo nos ayudan a seguir la trama, si no a otorgarle al conjunto un tono de extrañeza porque es como si Arletty nos contase la historia una vez pasada, pero relata hechos en los que ella no intervino y no estaba presente.

Otro dato curioso es que la mayor parte de las muertes que se dan en la película son más sugeridas que explicitas por lo que queda en manos del espectador la interpretación que se les de. Bueno, la verdad es que todos los interrogantes que nos sugiere Messiah of Evil: ¿de dónde viene esta especie de infección maldita? ¿cómo se contagia? ¿porque estos infectados salvan a algunas personas y a otras no? ¿porque se pinta el padre de Arletty la cara de azul? queda en nuestra mano, los espectadores, darle una interpretación.

Como habéis podido comprobar Messiah of Evil ha sido una película que a pesar de sus imperfecciones, me ha fascinado y que os recomiendo encarecidamente. Dejaros atrapar por la maldición de Cape Dune, estad prevenidos para cuando aparezca la luna de sangre porque abrirá las puertas del Infierno. "Y, entretanto dejemos que nuestro tiempo discurra, suavemente, en la prisión de nuestras mentes.



lunes, 22 de julio de 2019

VACACIONES MORTÍFERAS: EUROPA


Para la tercera y última semana de este especial veraniego en el que os estoy descubriendo lo seguro que es viajar por el mundo, no nos iremos muy lejos y vamos a disfrutar de la multiculturalidad que nos ofrece nuestra querida Europa. Casi cada país que forma parte de la Unión disfruta de un idioma, unas tradiciones, unas creencias y, por lo tanto, de unos terrores y demonios diferentes. No olvidemos que ésta es la tierra de Vlad el Empalador, el Frankenstein de Mary Shelley, el Krampus, el Kraken y la infinidad de duendes y hadas que habitan los bosques del norte del continente. 

Aunque en Europa carecemos de un mercado tan potente como el americano en lo que a  cine de género se refiere, lo cierto es que desde The Cabinet of Dr Caligari (1920), Haxan (1922) o las películas de Paul Naschy, el cine de género siempre ha estado presente en la industria cinematográfica de casi todos los países de este vasto territorio. El Euroterror huye de remakes, secuelas y productos mil veces vistos, algo tremendamente habitual en el cine hollywoodiense. El cine de género europeo aporta nuevas ideas que son rápidamente copiadas por los norteamericanos para hacer su versión adaptada al pueblo yanqui, es decir, con un pátina de blanqueamiento frente al horror y la crudeza que hace que pierda toda la esencia de la película original. Si por algo se caracteriza este cine de terror europeo es por la controversia, la violencia extrema y la falta de tabúes a la hora de presentarnos historias que erizarían la piel de cualquiera.

Dicho esto, se que no estaréis deseando preparar vuestras maletas para emprender un viaje de Interrail que promete ser apasionadamente terrorífico, pero esto arranca ya. Por cierto, no estaría de más que avisarais a vuestros amigos que se encuentran de Erasmus para que tomen notas de las precauciones que os sugiero en las PELÍCULA de VACACIONES MORTÍFERAS en EUROPA.


DETOUR (2009) - Suecia



Iniciamos este viaje europeo deteniéndonos en la bella Suecia, para nada más y nada menos que adentramos en un bosque un tanto peculiar, pero voy a poneros en antecedentes.

Martin y Lina son una pareja que se ofrece a ayudar a un amigo suyo que se casa ese fin de semana, para ir a comprar el alcohol a Suecia, dónde es mucho mas barato (Es una práctica muy habitual entre los Noruegos ya que las restricciones e impuestos que tiene el alcohol en este país son brutales). De vuelta a Noruega, por la carretea secundaria que han elegido para evitar los controles que les impedirían meter todo ese alcohol en el país, se encuentran con que ésta está bloqueada por un accidente. El policía del control les indica el desvió que deben de tomar para volver a casa, pero los contratiempos se suceden uno tras otro y el cariz siniestro de estos, va en aumento. Nuestros protagonistas se darán cuenta más bien tarde que todos los incidentes no son fruto de la mala suerte y que todos sus movimientos están siendo filmados. 

Tras el éxito de la saga Cold Prey o Dead Snow, el cine de género noruego vivió un boom a finales de los años 2000 en el que proliferaron las cintas de terror de bajo presupuesto con calidad variable. En este entorno surgió la película de Severin Eskeland, un guionista y director curtido en los cortometrajes de género, lo que demuestra la gran calidad técnica y cinematográfica de Detour. Es una pena que no se pueda decir los mismo del guión porque termina siendo predecible, carente de fuerza y no muestra nada nuevo bajo el sol.

Este thriller noruego de terror empieza como un sucedáneo de Dead End (2003) con una atmósfera muy lograda en un bosque tenebroso en el que aparecen personas extrañas de la nada y se acaba convirtiendo el algo parecido a si metemos a Hostel (2005) The Texas Chainsaw massacre (1974) en una batidora. Sí, queridos horror lovers, en los bosques suecos también existen los paletos sanguinarios, pero aquí se han adaptado a la nueva era y tienen un gusto especial por las nuevas tecnologías y lo que éstas pueden ofrecerles a sus negocios mortíferos.

Detour es una película correcta de 77 minutos, ahí su parte buena, que podría haberse arriesgado mucho más con escenas en las que la violencia no ocurriera fuera de pantalla y dónde nos hubieran contado algo más acerca de las motivaciones y negocio de los asesinos. Además, no es nada creíble que los protagonistas tarden tanto tiempo en darse cuenta que todas las cosas raras que están pasando están conectadas y algunas de sus reacciones son un tanto peculiares.

Lo que destacaría de esta cinta Noruega es la ambientación en el bosque de la primera primera parte que era bastante prometedora si la historia nos hubiera llevado por otros derroteros y el conocimiento que adquirimos sobre la cultura de estos países. ¿Os habéis dado cuenta que en el cine Noruego se representa a las fuerzas del orden de una manera un tanto peculiar? La rivalidad "amistosa" entre Suecia y Noruega es un hecho.

CONSEJO VACACIONAL: Un bloqueo en una carretera solitaria en medio de un bosque, realizada por un único agente de policía no es de fiar. Date la vuelta y vuelve por dónde has venido, seguro que cuando llegues a casa sano y salvo, me lo agradecerás. 

VALORACIÓN: Detour es una cinta que podéis esquivar perfectamente a no ser que estéis especialmente interesados en el cine de terror nórdico. No es que sea una mala película, sino una anodina que no aporta nada relevante al género.



THE SHRINE (2010) - Polonia



Del Norte, viajamos hasta un país centroeuropeo, Polonia, en el que unos periodistas americanos van a experimentar cómo los habitantes de un pequeño pueblo nos los reciben precisamente con los brazos abiertos. Aunque en un primer momento, estos lugareños con malas pulgas puedan recordarnos a los de The Wicker Man (1978), And soon the darkness (2010) o la más reciente The Ritual (2018), lo cierto es que los derroteros de esta modesta película no van a ir por el mismo lugar.

Carmen es una joven periodista muy ambiciosa que cree haber descubierto una gran historia: varios mochileros han desaparecido sin dejar rastro en Polonia y quiere viajar allí para averiguar qué le ha pasado a uno de ellos. Aunque su editor se niega, ella vuela hasta el último paradero conocido del mochilero americano, el pequeño pueblo ficticio de Alvania, junto a su novio fotógrafo profesional y su compañera becaria. Allí los lugareños les reciben de manera tan hostil que les echan del pueblo, pero a la salida ven una densa niebla en una parte del bosque y deciden investigarla. Carmen y la becaria, se adentran en la niebla dónde descubren una extraña estatua y cuando logran salir del lugar, los pueblerinos les retienen con consecuencias terribles. 

Segundo largometraje del director canadiense Jon Knautz, tras la interesante Jack Brooks: Monster Slayer (2007) que no me explico como todavía se encuentra entre mis pendientes con las buenas críticas que he leído sobre ella. En esta ocasión, Knautz, nos trae una película de Folk Horror o de Terror Rural tan de moda últimamente gracias al inminente estreno de la esperadísima nueva película de Ari Aster, Midsommar (2019). Pero lo que en un principio parece una cinta un tanto mediocre sobre lugareños mal encarados, sufre un giro de guión en su tramo final totalmente inesperado, que logra salvar los muebles y que The Shrine pase de ser una cinta anodina, a una película decente.   

El problema que le encontraba a The Shrine es que por su forma de estar grabada más bien parecía una TV movie y su personaje principal, Carmen era un tanto odioso. Desde el primer momento, nos la presentan como una periodista muy ambiciosa, manipuladora y mentirosa que pone como escusa una investigación para averiguar el paradero del mochilero, cuando lo que verdaderamente busca es alcanzar la fama, destapando una gran historia. Si a esto le sumamos que el CGI usado en varias de las escenas, como en la recreación de la misteriosa niebla, era bastante penoso, el visionado empezaba a hacer aguas por todos lados.

Sin embargo, todo da un giro de 180 grados en los últimos minutos y nada, ni nadie es lo que parece. El gore se concentra en este tramo y la sangre brota por doquier para finalmente dejarnos con la sensación de que la película ha merecido la pena y que, contra todo pronóstico, consigue sorprender. Es todo un acierto que los diálogos de los lugareños, polacos ellos, no aparezcan subtitulados porque se consigue transmitir a la perfección la sensación de forasteros que tienen los protagonistas y que nunca sean conscientes de lo que verdaderamente está pasando. Una falta de entendimiento que llevará a unos y a otros a un trágico final. 

CONSEJO VACACIONAL: Si sois conocedores de que en un territorio está desapareciendo gente en extrañas circunstancias, no os creáis más listos que la Interpol y vayáis a investigar por vuestra cuenta porque por muy periodistas que seáis, ya que lo mejor que os puede pasar es que corráis la misma suerte que los desaparecidos. 

VALORACIÓN: The Shrine es una película que si conseguís superar su primera mitad, os deleitará con un giro en la trama con el que no contabais y como decía un gran sabio de GH: "ni los buenos son tan buenos, ni los malos, tan malos".



MIDSOMMER (2003) - Dinamarca



Volvemos el norte de Europa para celebrar el Midsommar o solsticio de verano, una de las fiestas más importantes de Suecia, que teniendo en cuenta lo poco que ven el sol por estos lares, no me extraña que lo celebren por todo lo alto.

El último día de clase, Christian y su hermana pequeña acuden a una fiesta con sus amigos, pero la alegría y diversión pronto se tornan en tragedia cuando la joven Sofie, de tan sólo 18 años, se suicida. Dos meses después, Christian y sus amigos viajan como cada año hasta una cabaña en el bosque sueco para celebrar el solsticio de verano. Pronto empiezan a sucederse los hechos extraños y el joven estudiante empieza a creer que el espíritu de su hermana quiere comunicarse con él. 

Ópera prima del director danés Carsten Myllerum que a parte de otra cinta infantil sobre viajes en el tiempo, ha dedicado toda su carrera al mundo de la televisión. Este Midsommer de 2003, nada tiene que ver con la película de Ari Aster que toma como base el Folk Horror, si no más bien con una versión escandinava de I know what you did last summer (1997). Lamentablemente, en esta película se le ha dado mucha más importancia al drama que a la sangre y esto no es un slasher, si no un thriller de terror psicológico muy ligerito. 

El comienzo de la película es bastante potente con el suicidio de la joven, pero la presentación de los personajes y sus conflictos se alargan tanto que llega un momento en el que sabes que aquí asesinatos va a haber pocos y el único misterio será averiguar por qué se suicidó Sofie y si realmente hay fantasmas en la casa. La cinta cae en varios clichés mil veces vistos en el cine de terror, como la foto grupal al comienzo de la cinta o jumps scares de manual. Además, una vez que descubrimos el pastel, no existe ninguna explicación lógica para las cosas que han pasado durante toda la película que realmente estaban ahí puestas para despistar.

Salvo la dependienta de un supermercado que conocen en el viaje, todos los personajes son antipáticos. El protagonista tiene en todo momento una cara de no saber a qué ha venido y muchas de sus decisiones no son compatibles con estar atravesando el duelo por el suicidio de su hermana, de la cuál desconocía totalmente que tuviera ningún problema. Hay un momento en la cinta que se va a correr por el bosque para despejar la mente y es absolutamente lamentable ver como se mueve como un pato mareado y no como una persona acostumbrada al running.  

Curiosamente, Midsommer (2003) recibió una gran aceptación en los países escandinavos y la industria americana creyó haber encontrado un nuevo filón que explotar. En 2008 se estrenaba el remake americano titulado Solstice protagonizado por Aaron Ashmore, hermano gemelo del fotógrafo que aparecía en la anteriormente mencionada The Shrine (2010) y es que como son dos gotas de agua, da la sensación que están en cientos de producciones.


CONSEJO VACACIONAL: Si recientemente ha fallecido un familiar o un amigo cercano, no creo que sea el momento más adecuado para hacer una escapada de fiesta y alcohol con los amigos, porque es casi imposible que os lo paséis bien.

VALORACIÓN: Midsommer es una cinta engañosa que se vende como una película de terror que no es. Sinceramente os aconsejo que no perdáis el tiempo con ella porque dramas y películas de género las hay mucho mejores en el cine escandinavo. 



RAMMBOCK: BERLIN UNDEAD (2010) - Alemania



Muy agradecida a Rammbock (2010) por ese soplo de aire fresco a las temáticas que se estaban sucediendo en esta especial de verano, en el que ya empezaba a estar un poco saturada de psicópatas y paletos sanguinarios. El género zombi también se asoma a los viajes mortíferos y es que en el momento más inesperado puedes encontrarte en medio del estallido de una epidemia de infectados como le pasa a nuestro atípico protagonista.

Michael viaja hasta Berlín para devolverle las llaves a su ex novia, en un último intento por reconquistarla. Cuando llega al bloque de apartamentos de la joven, en la ciudad ha estallado una epidemia zombi que transforma a los infectados en maníacos sedientos de sangre y carne humana. Michael y el joven Harper al que acaba de conocer y que se encontraba en el bloque haciendo unas chapucillas, tendrán que luchar para sobrevivir y escapar del edifico que se ha convertido en una especie jaula asediada por los infectados.

Nos enfrentamos a otra ópera prima, en esta caso la del director alemán Marvin Kreun resuelta con mucho más acierto que las anteriores. Tras varios cortometrajes de carácter más bien dramático, Kreun se decantó por una cinta a la que por poco no podríamos denominar largometraje, debido a su poco más de una hora de metraje. Sin embargo, es de agradecer que en estos 64 minutos la historia vaya al grano y hasta haya elementos que hubiesen requerido una mayor explicación.

Rammbock sigue la tendencia de muchas películas del género zombi de los últimos años, que se basan en una trama de carácter dramático que casi como mera anécdota, se ambienta el plena apocalipsis zombi como por ejemplo: Retornados (2013), The Cured (2017), Cargo (2017) o la reciente serie de Netflix, Black Summer (2019). No suelo ser muy fan de esta vertiente del cine zombi que a la vez veo como muy refrescante y una forma de renovar el subgénero, pero que a mi no me funciona porque lo que busco en estas películas es acción desenfrenada y hordas de no muertos al ataque. Sin embargo, contra todo pronóstico, Rammbock me ha resultado bastante interesante, puede que por su corta duración y, a pesar de que me recordaba mucho a REC (2007), escena de la anciana infectada incluida.

Aunque el tono de la película es serio, ya que estamos frente a un drama romántico en el que nuestro protagonista le da casi la misma importancia al apocalipsis que a encontrar y agradar a su ex novia, lo cierto es que hay algunos elementos de humor que encajan a la perfección con el carácter peculiar de Michael. No entendemos por qué una de las noches duerme con un disfraz de oso de peluche o por qué le molesta tanto que Harper construya armas con los tenedores de la casa. Pero sin duda el momento más gracioso es cuando el protagonista se saca una foto con el ariete que han fabricado y que da nombre a la película: rammbock.

Resulta muy interesante la ambientación de la crisis zombi en un bloque de apartamentos que cuenta con un patio común por el que todos los vecinos pueden verse a través de las ventanas. Nos encontraremos con personajes de todo tipo: los valientes, los que se niegan a la evidencia, los que utilizan a los demás en su propio beneficio, ... También las persecuciones de los zombis en los pisos son totalmente claustrofóbicas y angustiosas, manteniendo la tensión del espectador que no atisba ninguna escapatoria posible.


CONSEJO VACACIONAL: Si tu pareja te ha dejado y vive en otra ciudad, mándale las llaves por correo porque te ahorraras más de un disgusto y quizá enfrentarte a hordas de zombis asesinos.

VALORACIÓN: Rammbock es un drama zombi muy cortito que merece mucho la pena. Destacaría la psicología tan singular del protagonista obsesionado con su ex novia para el que no encontrarla en más drama que la crisis zombi y la asombrosa fotografía de una apocalíptica Berlin.


ROSEVILLE (2013) - Bulgaria



Pues si la ventaja de la película anterior era su corta duración, Roseville termina convirtiéndose es un tostón inconmensurable debido a sus más de dos horas de metraje. Hay una cosa que no puedo entender y no se cómo los productores o directores de las películas no se dan cuenta que 90 minutos de duración son más que suficientes para contar una historia.

El comienzo de la película era bastante prometedor con la entrevista al encargado de la investigación de los asesinatos sin resolver, cometidos en 1985 en Roseville, un hotel rural en pleno bosque de los Balcanes. Tras esta primera toma de contacto con el caso, un anuncio nos advierte que lo que vamos a ver a continuación es una recreación artística basada en la evidencias materiales que se encontraron en la hacienda: una joven pareja decide pasar su luna de miel en este variopinto paraje regentado por una pareja de amigos y lo que prometía ser un viaje idílico, se acaba convirtiendo en una pesadilla demoníaca para todos los huéspedes.

No os lo vais a creer, pero estamos ante otro debut de un cineasta europeo, en esta caso el búlgaro Martin Makariev que cuenta con varios trabajos en publicidad y televisión y con otro largometraje, pero alejado del género que nos ocupa.  

Roseville tiene la ambientación de una película de terror clásica en un gran caserón asolado por fuerzas oscuras, personajes poseídos, extraños amuletos, arboles centenarios y dónde nadie es lo que parece o quizá sí. La cinta está muy bien rodada, las actuaciones son muy buenas y la historia apuntaba a ser muy interesante, pero el único problema que tiene es que a la película le sobra, al menos, media hora. Esto provoca que el tedio se apodere del visionado y que se pierda todo el interés en una trama un tanto confusa, que nos marea con idas y venidas de personajes revenidos, persecuciones, revelaciones sorprendentes y hasta un lobo telépata. 


CONSEJO VACACIONAL: No elijáis como destino para una luna de miel un paraje alejado de la civilización porque cuál es el fin de esto ¿qué nadie os moleste? Pues pensad que si alguien os molesta, ya sea el psicokiller o el espíritu de turno, no tendréis a nadie a quién pedir ayuda.

VALORACIÓN: La verdad es que lamento mucho haber visto esta cinta en último lugar porque estoy segura que me hubiese gustado mucho más si no hubiese estado tan cansada. Así que a pesar de que mi valoración no es muy buena, os recomendaría que le dierais una oportunidad a Roseville, un día que estuvierais muy descansados y con hambre de cine para sentaros dos horas frente al televisor sin ser víctima del tedio que me arrastró a mi. 



MEJORES PELÍCULAS DE TERROR VIAJERO EN EUROPA:

  • Cub (2014)
  • Cold Prey (2006)
  • Hostel (2005)
  • A Lonely Place to die (2011)
  • The Descent (2005)
  • Eden Lake (2008)
  • Spring (2014)


  • Y, hasta aquí este especial veraniego que este año ha contado con una semana menos porque en pocos días me voy de viaje a la tierra que voy nacer al inclasificable Yorgos Lanthimos. Espero que disfrutéis de unas vacaciones increíbles y que dejéis todo lo terrorífico para salas de cine y sillones caseros. Además, este verano es bastante estimulante para los Horror Lovers con grandes estrenos como la ya mencionada Midsommar, lo nuevo de mi adorado Alexandre Aja, Crawl con cocodrilos mortíferos y la muy esperado por mi, 47 Meter Down: Uncage. Recemos al espíritu de nuestro venerado George A. Romero, para ninguna de ellas nos decepcione y disfrutemos de un verano mortífero por todo lo alto.


    ¡¡¡¡¡¡¡¡FELICES VACACIONES HORROR LOVERS!!!!!!!